La Secretaría de Marina detalló en un oficio dirigido a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) la manera en que murió un civil que conducía su automóvil en los alrededores del lugar donde se realizaba el operativo en el que resulto muerto el narcotraficante Arturo Beltrán Leyva.
La Marina explica -en el documento recuperado hoy por Ciro Gómez Leyva, en su columna de Milenio– que algunos de sus elementos dispararon contra el civil porque “hizo caso omiso cuando se le marcó el alto y aventó el coche a elementos de la Secretaría de Marina”.
En respuesta a las acusaciones de la CNDH, la Marina destaca que la actitud del conductor era un caso de “peligro inminente, por eso se actuó conforme a los Principios Básicos sobre el Empleo de la Fuerza y las Armas de Fuego”.
Extraña a la Marina que la CNDH omita otros factores denunciados:
• Que VI rompió el cerco de seguridad.
• Que el examen toxicológico a VI dio positivo al alcohol en 242 mg/dl. Es decir, iba totalmente borracho.
• Que en esos momentos, el área de Inteligencia de la Marina informó (lo que se “confirmó posteriormente”) que 40 vehículos venían de Acapulco y 30 del DF a rescatar a Beltrán Leyva.