Reforma destaca que Carlos Slim, el hombre más rico del mundo, enfrenta por primera vez un desafío por parte del gobierno mexicano y sus competidores, luego que la semana pasada, la Suprema Corte de Justicia de México determinara que Telcel, la matriz de América Móvil (de la cual es el principal dueño), no podía seguir ignorando las decisiones de los reguladores sobre las tarifas de interconexión mientras la empresa apelaba los fallos en los tribunales.
La decisión se produjo semanas después de que el regulador de las telecomunicaciones multara a Telcel con mil millones de dólares por presuntas prácticas monopólicas, la cual, según anunció la empresa, sería apelada.
Y es que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) calcula que los consumidores mexicanos pagan al menos 6 mil millones de dólares al año en costos telefónicos por encima del promedio.
Las acciones en América Móvil cayeron, aproximadamente, 1% en la última hora de corretaje el día en que se emitió el fallo judicial y 3% adicional la mañana siguiente, lo que se tradujo en una pérdida de 4 mil millones en su valor de mercado. Hijo de inmigrantes libaneses, Slim sigue siendo el empresario más poderoso de México. Hay, consigna el diario, quienes han especulado con que el presidente Calderón sea demasiado tímido para ejercer presión sobre Slim.
El domingo hubo versiones sobre una posible sustitución a Rafael del Villar, un comisionado de Cofetel que encabezó la campaña contra Telmex y cuyo periodo en el cargo acaba de expirar.
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