La diputada capitalina Alejandra Barrales -que ahora contiende por la candidatura de la izquierda a la jefatura de Gobierno del Distrito Federal- fija sus miradas en dos rivales: Miguel Ángel Mancera, exprocurador del DF y también precandidato de la coalición PRD-PT y Movimiento Ciudadano, e Isabel Miranda de Wallace, la activista civil recientemente abanderada del PAN.
Apoyada por la corriente perredista Izquierda Democrática Nacional, una de las mayoritarias en la Ciudad de México y al frente de la cual se halla René Bejarano, y de jóvenes universitarios pertenecientes a los tres partidos de izquierda que irán en coalición a las próximas elecciones de julio, Alejandra Barrales es dura con Miguel Ángel Mancera, aunque sin perder las formas, y aclara que “nadie puede creer que la seguridad que hoy distingue a la ciudad es consecuencia del trabajo de una sola persona, sino de 15 años de labor política en los que fue construida una red de programas sociales que acotan las causas de la actividad delictiva”.
Con Miranda de Wallace, Barrales es diplomática, aunque sin concesiones: “Por primera vez, en la ciudad de México tendremos una contienda entre mujeres –afirma, dando por seguro que obtendrá la nominación de izquierda para la jefatura de gobierno local–, y eso habla bien de las luchas que hemos dado en la izquierda, orientadas a que ser mujer no represente una desventaja, sin que tampoco represente ventaja alguna.”
Sin embargo, aclara que “no todo es perspectiva de género, y para gobernar la capital del país se necesita, más que nada, experiencia política y conocimiento sobre los problemas de la ciudad. Por eso –afirma, en entrevista concedida a Animal Político–, es muy importante revisar qué ha hecho cada una, sus orígenes, las trayectorias hacen la diferencia”.
Inteligencia contra corrupción
Líder sindical de sobrecargos a los 22 años, secretaria de Desarrollo Social de Michoacán durante el gobierno de Lázaro Cárdenas Batel y de Turismo en la Ciudad de México en los primeros dos años de gestión de Ebrard, además de expresidenta del PRD capitalino y hoy de la comisión de gobierno de la Asamblea Legislativa, Alejandra Barrales plantea tres puntos prioritarios, “pensando ya en la oferta al electorado, no sólo en la militancia que hubo de ser encuestada este fin de semana: trabajo, sustentabilidad e inteligencia policial”.
“La reactivación del empleo es obligada –asegura– porque, habiéndolo, atemperas la inseguridad, le das sentido a la educación de los jóvenes y, con estos dos factores, echas a andar un círculo virtuoso; en tanto que la sustentabilidad en términos de agua, de residuos sólidos, de usos de suelo, se vuelve básica en una ciudad tan grande como la capital del país”.
En cuanto a seguridad, destaca la legisladora que coordina la bancada del PRD en la Asamblea, “es necesario implementar mecanismos de inteligencia que nos permitan ir al centro del fenómeno delictivo, aunque el principal reto es lograr la credibilidad de la gente en la policía.”
Y es que, asegura, “a la población de la Ciudad de México le da miedo denunciar, proporcionarle datos a la policía, ahí el reto se llama corrupción policiaca, entonces, cómo le hacemos para no confundir, porque se se habla de una disminución en el índice delictivo (en referencia al exprocurador Mancera, quien en su estrategia de promoción ha puesto al frente las estadísticas generadas durante su gestión en la PGJDF), cuando en realidad estamos hablando de que la gente no está reportando los delitos de los que es víctima.”
“A la corrupción policiaca –remata–, hay que combatirla de arriba hacia abajo.”
Lenguaje de género
El pasado 13 de enero, la aspirante a la candidatura de izquierda al GDF hizo pública una misiva dirigida a Manuel Camacho Solís, coordinador del DIA (Diálogo por la Reconstrucción de México, el buró interpartidista en el que están representados los tres partidos que irán en coalición a las próximas elecciones), en la que le exigió que fuera incluido “el lenguaje de género” en la encuesta con la que se definirá al aspirante mejor posicionado, la cual concluye hoy lunes.
Asimismo, Camacho fue informado en la misiva de que la legisladora “valora la posibilidad de contar con una casa encuestadora (independiente de las tres contratadas para la realización del ejercicio partidista) que con la misma muestra y preguntas levante un sondeo este fin de semana”.
Ese mismo día en la tarde, y luego de una reunión con todos los precandidatos, Camacho anunció que las suspicacias relacionadas con la redacción de las preguntas que incluirá la encuesta habían quedado zanjadas y aclaró, también, que cualquier otra encuesta realizada por los contendientes carecería de valor.
