Luis García López, primer visitador de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), confirmó que los balazos que mataron a los dos normalistas de Ayotzinapa en la Autopista del Sol “salieron del lugar donde estaba la policía ministerial”.
La comisión realizó un peritaje el jueves 12 de enero, donde se estableció que la trayectoria de las balas fue “de poniente a oriente”, es decir, desde donde estaban ubicados los elementos de la policía ministerial.
García López explicó que esto está sustentado en la reconstrucción de los hechos y el estudio forense de los cuerpos de Alexis y Gabriel, los jóvenes fallecidos.
Sin embargo, el visitador de la CNDH reconoció que todavía no pueden determinar el calibre de las balas.
Además, García López acusó que ninguna de las dos corporaciones policiacas, la ministerial y la federal, se preocuparon por preservar la escena del crimen, porque muchos cascos percutidos fueron recogidos para borrar la evidencia.
Actualmente, la CNDH trabaja en Guerrero con dos peritos y 15 visitadores, quienes recogen información de 31 personas agraviadas por el enfrentamiento entre policías y estudiantes normalistas de Ayotzinapa en la Autopista del Sol el pasado 13 de noviembre, los familiares de los dos alumnos fallecidos y de un joven torturado.
García López también negó que la CNDH proteja a la Policía Federal, como hace unos días lo aseguró el exprocurador de Guerrero, Alberto López Rosas, y defendió a la comisión diciendo que “hemos dicho en el informe preliminar, que la corporación que inició el problema fue la Policía Federal, ya que lanzó una granada de gas lacrimógeno que generó el desorden”.
Hace unos días, la CNDH documentó el uso de armas largas y gases lacrimógenos en manos de policías estatales, ministeriales y federales, además del intento de los elementos de estas corporaciones de “fabricar” los hechos mediante la “siembra” de un arma AK-47 a un estudiante y la recolección de casquillos en la autopista de Chilpancingo.
Con información de Milenio.
