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<i>The Economist</i> recomienda permitir entrada de Slim a la televisión
<i>The Economist</i> recomienda permitir entrada de Slim a la televisión
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<i>The Economist</i> recomienda permitir entrada de Slim a la televisión
03 de febrero, 2012
Por: Redacción Animal Político
@WikiRamos 
Carlos Slim. Foto: Cuartoscuro.

México sufre de mercados casi monopólicos en las ramas de la telefonía y la televisión, afirmó este viernes The Economist, al tiempo que recomendó dejar a Slim entrar en el negocio televisivo.

A pesar de que Slim es el hombre más rico del mundo, con 63 mil millones de dólares, la revista británica hace la recomendación de que Slim entre al negocio de la televisión abierta y de paga, lo cual podría ser un elemento clave para abrir la competencia, afirmó la revista en su versión en línea.

La publicación británica afirmó en el artículo titulado “Dejen que se enfrenten los gigantes” que de concretarse la entrada de Slim al negocio de la televisión, mayor competencia llegaría en poco tiempo, algo que de otra forma sería imposible en el sector de las telecomunicaciones. The Economist afirmó también que Carlos Slim tendría que cortejar a los consumidores no sólo con más bajos precios, sino con buena programación en sus canales.

Gráfica de The Economist.

Un gran mercado sigue fuera del alcance del magnate de la telefonía: el de la televisión abierta y por cable. Bajo los términos de su concesión de Telmex, él perdió el derecho a entrar en la televisión, así que en todos los lugares donde América Móvil ofrece el triple play de telefonía , internet y televisión -que es casi en todos los países latinoamericanos- Slim está fuera de el negocio televisivo.

Por muchos años, Slim ha tratado de terminar legalmente con la prohibición, pero no lo ha logrado. Los reguladores mexicanos han enfrentado dificultades para lograr la competitividad en ambos mercados.

Según The Economist, las nuevas tecnologías le dan una nueva oportunidad a Slim: podría permitirle invadir el terreno de Televisa al ofrecer televisión abierta, tratando de terminar con el duopolio en el que Televisa tiene el 70% de los televidentes. Televisa domina además la telefonía de paga, con alrededor de45% del negocio de cable en el país y 60% del servicio satelital. De acuerdo con la CFC, mayor competencia en el sector de TV de paga podría bajar los precios e incrementar el tamaño del mercado en una tercera parte.

Las presiones de Telmex no han cesado y, por ejemplo, en octubre pasado transmitió en vivo parte de los Juegos Panamericanos por medio de Uno Noticias. Los rivales se quejaron, pero al momento no ha existido sanción. En 2008, Slim logró un trato con Dish, una empresa de televisión por satélite, en el que Telmex realiza la facturación y vende paquetes en sus tiendas, lo cual también ha causado quejas de la competencia. Dish es el servicio de paga más barato, con una tarifa de 109 pesos al mes, menos de la mitad del costo del paquete más barato de Sky, cuyo socio mayoritario es Televisa.

Telmex, también de Slim, aún controla hoy 80% de las líneas fijas en el país y 75% de las conexiones de banda ancha, afirmó la revista británica. Telcel, su compañía hermana, acumula el 70% del mercado de celulares. Ambas compañías pertenecen al enorme consorcio América Móvil, el cual llega a 18 países en el continente, siendo el más grande e 15 de ellos. A pesar de que México es uno de países latinoamericanos más ricos, la penetración del uso del teléfono celular llega a 88%de la población, uno de los niveles más bajos en el continente. En Brasil, un país más pobre, el índice llega a 119%, es decir, hay más celulares que personas. Con casi 250 millones de suscriptores, América Móvil es la tercera compañía de celulares en el mundo y representa el 60% de la fortuna de Slim, de acuerdo con Forbes. Buena parte de los suscriptores de la empresa están en México, donde el margen de las ganancias en el concentrado sector de los celulares se encuentran entre las más altas del mundo.

La fortuna de Slim  fue creada en la telefonía, después de haber crecido moderadamente antes con propiedades, minas y otros negocios. Carlos, hijo de un libanés inmigrante de nombre Salim Slim, compró Telmex, el ex monopolio estatal de telefonía fija en los años del sexenio de Carlos Salinas de Gortari, en 1990.

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