En un operativo de búsqueda de miembros de La Familia Michoacana, policías armados irrumpieron en un campamento para niños escolares de entre 6 y 7 años a 150 km de la Ciudad de México.
Los policías, que llevaban una orden de cateo, provocaron temor entre unos 40 niños del Colegio Americano que dormían en el Rancho (granja) Mateos en la zona turística de Valle del Bravo.
“Patearon sus cosas, gritaban y les revisaron armarios y pertenencias a todos“, denunció un padre de familia, según Reforma. Al cabo de media hora, los siete agentes se dieron cuenta de que había una equivocación y se marcharon.
El secretario de Seguridad y jefe de la policía del Estado de México, Salvador Neme, admitió que se trató de un error originado por una falla en las tareas de inteligencia que no advirtieron que se trataba de un lugar de actividades para niños. Además, anunció que los elementos que participaron en el operativo serán investigados. Por su parte se dio a conocer que todos los estudiantes están a salvo y de vuelta en la Ciudad de México.
La denuncia sobre la irrupción policial se produce justamente cuando Amnistía Internacional reveló su reporte anual 2012, en que cuestiona los excesos de la fuerza pública en sus operativos antidroga en México, reporta Terra.
Con información de Terra y Infobae.
