El secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, explicó en rueda de prensa que la compra de un nuevo avión presidencial tiene antes que todo “características de seguridad nacional”, y que si bien el proceso de adquisición del aparato recaerá en la próxima administración, el trabajo preparatorio, dijo, se ha realizado con “absoluta transparencia y claridad”.
En este sentido, Poiré explicó que la evaluación para la compra de un nuevo Boeing 787, que tendrá un costo superior a los 750 millones de dólares, “se ha hecho conforme al presupuesto de egresos así autorizado”.
“Se trata de una adquisición, por obvias razones, vinculada a la seguridad nacional de nuestro país”, dijo el secretario de Gobernación en conferencia de prensa, en la que insistió que ésta será una decisión que se tendrá que valorar por la administración entrante.
Una aeronave de 10 mil millones de pesos
Ayer, diario El Universal publicó que el gobierno federal aprobó la compra de un nuevo avión para las giras internacionales del presidente de la República, que tendrá un costo de 750 millones de dólares, casi 10 mil millones de pesos.
Fuentes consultadas por ese diario señalaron que “se trata de una decisión de Estado”, ya que la aeronave no será empleada por el actual mandatario. La aeronave será entregada en 2015, a mediados de la próxima administración presidencial.
El aparato previsto es un nuevo modelo del Boeing 787, del cual sólo hay un prototipo hasta ahora, por lo que será un avión único en el mundo y el gobierno mexicano se convertirá en su primer usuario, agregaron las fuentes.
Con información de El Universal