Las autoridades francesas anunciaron este martes que un ladrón robó planos de algunos de los edificios de gobierno más importantes de aquel país, los cuales no estaban encriptados y ahora están en poder de quien robó una memoria USB a un empresairo que instalaría sistemas de seguridad en los edificios.
El ladrón no tardará mucho en averiguar que dentro de la USB que robó el domingo están los planos. Los documentos los tenía consigo un empleado de la empresa encargada de instalar fibra óptica en varias sedes institucionales. El domingo, mientras iba a recoger a un familiar en Lyon, a una de las estaciones de tren de París, se percató de que alguien le había robado la llave de su coche, donde había dejado sus personales.
Además de los planos del palacio presidencial, estaban también los croquis del ministerio del Interior, situado en la Plaza Beauvau, y de la Prefectura de París. Se trata por ello de planos muy confidenciales que detallan donde está situado cada uno de los inmuebles así como todas sus estancias. Habitualmente este tipo de documentos sensibles suelen estar encriptados, velados bajo códigos sólo accesibles a las personas que contienen las claves y no legibles para el resto. Sin embargo, en esta ocasión los mapas no contaban con ninguna protección.
La Policía desconoce si el ladrón se llevó la llave USB consciente de lo que esta contenía o si simplemente se trata de un robo menor, aunque, según confesó una fuente judicial al diario Le Parisien, en cualquiera de los dos casos no es nada tranquilizador saber que los edificios más importantes del estado galo están libres de secretos y en manos de ladrones.
Con información de El Mundo*
