El presidente Barack Obama rompió hoy su silencio, poco antes del primero de tres debates presenciales, para agradecer públicamente a su esposa Michelle por sus primeros 20 años de matrimonio.
Obama escribió en su cuenta en Twitter @BarackObama, utilizando la abreviación que distingue aquellos mensajes colocados por su campaña:
Twenty years ago today, I married the love of my life and my best friend. Happy anniversary, Michelle. -bo
— Barack Obama (@BarackObama) octubre 3, 2012
Enseguida tuiteó una foto donde se puede ver a los Obama el día de su boda:
Twenty years together: OFA.BO/ctdNaf, twitter.com/BarackObama/st…
— Barack Obama (@BarackObama) octubre 3, 2012
A través de la misma cuenta, se invita a la gente a desearle a la pareja presidencial un feliz aniversario firmando una carta en el siguiente vínculo.
Ahí, además, se puede ver el siguiente video de la pareja:
El mensaje remitido poco después de las 09:00 horas tiempo del este, fue respondido una hora más tarde por otro:
La felicitación fue la única acción “pública” que tuvo Obama poco antes de trasladarse a Denver, donde se verá las caras con Mitt Romney en la Universidad de Denver, en el primero de los tres debates que los confrontará antes de las elecciones del 6 de noviembre.
El debate será transmitido a las 08:00 horas, tiempo de México.
Durante los pasados dos días el mandatario se mantuvo recluido en Henderson, Nevada, haciendo prácticas del debate ayudado por el senador demócrata John Kerry, quien caracterizó a Mitt Romney en esos “rounds de sombra”.
El encierro pareció no sentar bien con un Obama que en los pasados días intensificó sus intercambios públicos, reflejo de que la cuenta regresiva para la elección está encima ya de los candidatos y de lo cerrado de la contienda.
El lunes, durante una sorpresiva visita a un centro de proselitismo de su campaña en Henderson, Obama externó en tono de broma el fastidio que le significó estar sometido a este judo con palabras, donde el objetivo no es solo hacer ver mal al oponente, pero si se puede, derribarlo.
“Esta bien, aunque básicamente me mantiene encerrado todo el tiempo. Es muy pesado. Hacen que haga mi tarea”, dijo a Andrea Stinger, una voluntaria de su campaña en una conversación por teléfono, recogida por los periodistas que lo acompañaban.
Con información de Ntx.
