Diario Reforma publica hoy que la venta de drogas, secuestros, robos, extorsiones y prostitución, que operan y controlan grupos organizados, azotan la Central de Abasto del DF (Ceda).
Así lo denuncian comerciantes, bodegueros y personal administrativo de la Ceda entrevistados por Reforma, quienes solicitaron el anonimato.
En el centro de abasto más grande del mundo, de 327 hectáreas –donde, al día, se comercializan 30 mil toneladas de mercancía y que es visitado por 300 mil personas–, entre la venta de alimentos y productos básicos se mueven cocaína y mariguana, según testimonios.
“La droga la meten camuflada con la fruta, en las flores, legumbres o entre costales. En la zona de bodegas llegan los cargamentos más duros”, afirmó un comerciante que lleva 20 años trabajando en este sitio.