El presidente Felipe Calderón Hinojosa reivindicó el deber moral de los gobernantes de apoyar a la gente más pobre de México, por encima de discursos sobre el combate a la pobreza y a la miseria extrema.
En la inauguración de la construcción y ampliación del camino rural Tlacoachistlahuaca-Metlatónoc, que requirió una inversión de mil 500 millones de pesos, el mandatario reconoció que esta obra es una de las más costosas del país.
Sin embargo, expresó, “creo que de las más justas, porque atiende a la gente más pobre, de la cual no se iba a ocupar nadie”.
Calderón Hinojosa dijo que lo que hay atrás de la cinta asfáltica “es el deber moral de apoyar a la gente más pobre de México”, y cuestionó a quienes desde diversos niveles de gobierno sólo han hablado de combatir la pobreza.
“Cuántos discursos ha habido en México contra la pobreza, cuántos discursos ha habido en México de combate a la miseria que se vive en esta zona de la montaña alta de Guerrero; cuántos gobernantes, cuántos presidentes, cuántos secretarios, diputados han venido a decir lo mismo”, declaró.
No obstante, argumentó que él llegó a esta zona a decir lo mismo, pero “con una pequeña diferencia, yo también vengo a hablar en contra de la pobreza, pero también me traje la carretera, esa es la diferencia”.
El presidente Calderón dijo que no se trata simplemente de una carretera que une a dos municipios muy pobres de México, sino que comunica a la montaña alta de Guerrero, que es la zona más pobre del país, con las oportunidades que ello representa.
Mencionó que si alguna persona quería matar una res y llevarla a vender a Tlapa, tenía que ocupar dos o tres días en el traslado “y se le echaba a perder en el camino”, mientras que ahora puede hacerlo en un trayecto de tres horas.
Del mismo modo, comentó que ahora los jóvenes podrán acudir a la preparatoria o si en alguna familia hay un enfermo, “lo pueden llevar al hospital, porque antes se les moría”; e insistió en que esa es la diferencia de un camino como este.
“Y me decían a mi, y no dudo que alguien me siga diciendo, cómo vas a hacer una carretera de mil 500 millones de pesos para 270 coches”, recordó Calderón Hinojosa, quien subrayó que lo importante es abrir caminos para la gente más pobre, “porque son caminos que abren las oportunidades”.
“Y no sólo son los 275 coches” sino también la posibilidad de que decenas de miles de los mexicanos más pobres puedan tener una oportunidad de trabajar, ir a la escuela, ir al doctor y comunicarse mejor, reiteró.
El titular del Ejecutivo federal abundó que por esa razón su administración invirtió en las zonas más pobres de México, “aunque para algunos no se justificaba” una obra, vial por ejemplo, porque no había el tráfico suficiente o el flujo de autos para justificarse.
Aclaró entonces que “no es una cuestión de flujo, no es una cuestión de pesos y centavos, es una cuestión que tiene que ver con pelear contra la pobreza”.
Resaltó que por eso ha hecho también la carretera que va de Tepic a la zona Cora Huichol en Santa María de El Nayar; la que va de Zacatecas a El Nayar; y la que va de Creel a Batopilas, en el estado de Chihuahua.
El presidente Calderón recordó que en esa zona inició su administración con un programa llamado “100X100”, con el cual se ha llevado agua, drenaje a comunidades dispersas de menos de dos mil 500 habitantes, y ya nueve de cada 10 hogares en México tienen ese servicio.
*Ntx
