La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) demandó al Estado mexicano “concertar las medidas cautelares” necesarias para garantizar la vida e integridad del defensor de migrantes Fray Tomás González, así como de su colaborador Rubén Figueroa y del resto de voluntarios que trabajan en la Casa-Refugio La 72, en Tabasco, donde brindan cobijo y alimentación a centroamericanos indocumentados que pasan por México en su ruta hacia Estados Unidos.
El organismo continental determinó echar mano de las medidas cautelares (figura legal que le permite obligar a un Estado a brindar protección a personas, cuando se hallen “en situaciones de gravedad y urgencia”), luego de que ocho agrupaciones e instituciones civiles dedicadas a la defensa de los derechos humanos denunciaran distintas amenazas y actos intimidatorios contra Fray Tomás y sus colaboradores, perpetrados por traficantes de personas que operan en las inmediaciones del municipio de Tenosique, fronterizo con Guatemala.
Al respecto, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro informó que la más reciente agresión contra La 72 y su personal fueron amenazas de muerte dirigidas a Fray Tomás y Rubén Figueroa, emitidas el pasado 17 de abril por tres sujetos que, a pesar que fueron denunciados y luego detenidos por las autoridades de Tabasco, en las horas siguientes recuperaron la libertad.
Estos sujetos, informó el Centro Pro, acusaron luego al religioso y sus colaboradores de desviar en su beneficio los donativos que recibe este albergue, “versión que se desmiente al simplemente observar los apoyos diariamente brindados a personas migrantes” en este refugio, lo que no impidió que el Ministerio Público acosara a Fray Tomás, “llamándolo a comparecer por un delito inexistente, mientras las denuncias penales en contra de los extorsionadores de migrantes no avanzan”.
La decisión tomada por la CIDH obliga al Estado mexicano, además, a emprender acciones que permitan al albergue seguir brindando ayuda humanitaria a los migrantes que cruzan la frontera con México, así como a presentar un informe oficial sobre las acciones emprendidas para garantizar la integridad del refugio La 72, su director y personal voluntario, así como otro informe sobre las investigaciones emprendidas por la autoridad, en relación con las amenazas de muerte contra Fray Tomás.
De mal en peor
Entrevistado luego de que se dieran a conocer las medidas cautelares dictadas por la CIDH, Fray Tomás González denunció que, del 19 de abril –cuando éstas fueron oficialmente ordenadas– a la fecha, en Tabasco se ha documentado el secuestro de siete migrantes, los cuales fueron liberados luego de pagar su rescate; asimismo, otros dos permanecen desaparecidos y uno más fue víctima de violación a manos de grupos de traficantes de personas.
“A pesar de que la Corte Interamericana ordenó al Estado mexicano garantizar la seguridad no sólo del personal del albergue, sino de todos los migrantes que en él son atendidos –explicó Fray Tomás–, lo cierto es que la situación de acoso no ha cambiado absolutamente en nada… ya con Enrique Peña Nieto como presidente la situación no sólo no ha cambiado, al contrario, la cosa está peor: el flujo migratorio ha aumentado y, con él, la violencia”.
El defensor de migrantes informó que, en lo que va del año, han atendido en la casa refugio La 72 a cerca de 6 mil centroamericanos, por lo que, explicó, en 2013 “podemos prever con seguridad que vamos a recibir en el albergue, a lo largo de todo el año, a más de 20 mil, lo que representa casi el doble de los migrantes que atendimos en 2012”.
