Desde hace 40 años la muerte de Pablo Neruda ha estado rodeada por un enigma sobre si el poeta perdió la vida a causa de un cáncer de próstata o de una inyección letal aplicada por miembros de la dictadura de Augusto Pinochet poco después del golpe militar, como asegura su asistente y chofer, Manuel Araya.
Este viernes 8 de noviembre, un grupo de peritos internacionales ha puesto fin a dicha especulación, revelando que, luego de realizar las pruebas toxicológicas a sus restos, queda descartada dicha hipótesis y confirmado su fallecimiento debido a cáncer de próstata.
[contextly_sidebar id=”f4d47af14de351aaa6d3601c0e94fef9″]”No se encontraron agentes químicos relevantes que pudieran relacionarse con el desenlace de la muerte de Neruda” ni tampoco “evidencia forense alguna que permita establecer una etiología médico legal por causas no naturales.” indicó Patricio Bustos, director del Servicio Médico Legal chileno, quien acompañó al grupo de científicos del Servicio Externo de Ciencias y Técnicas Forenses de la Universidad de Murcia, en España; de la Universidad de Carolina del Norte, en Estados Unidos.
El informe agregó que “se confirma por diversas lesiones de metástasis en varias partes del esqueleto, lesiones metastásicas… los análisis acreditan la presencia de elementos farmacéuticos para enfermedades de cáncer”.
Las pruebas toxicológicas fueron llevadas a cabo en Carolina del Norte, en Estados Unidos, y en la Universidad de Murcia, en España.
En febrero pasado, el juez chileno Mario Carroza ordenó la exhumación del cuerpo del poeta Pablo Neruda, Premio Nobel de Literatura 1971, para realizarle pericias y determinar si fue asesinado, luego de recibir una querella a nombre del Partido Comunista – donde militaba Neruda- que demandaba abrir una investigación sobre la muerte del poeta, ocurrida el 23 de septiembre de 1973, apenas 12 días después del derrocamiento y muerte de Salvador Allende.
De acuerdo con Manuel Araya, “alrededor de las cuatro de la tarde de ese día, le pusieron una inyección en el estómago. Me dijeron que era dipirona (un analgésico) para el dolor”. Horas después el poeta falleció.
Con información de los periódicos chilenos Emol y La Tercera.
