[contextly_sidebar id=”e42909371ecdacbaa08ad9ac69efb446″]El caso de Yakiri Rubio fue turnado al Juzgado 23 de delitos no graves, sin embargo al momento que el expediente llegó al juez, éste decidió irse y no revisar el asunto argumentando que el expediente le fue enviado muy tarde y ante ello no se pudo tramitar su libertad bajo caución.
De acuerdo con la abogada de la joven, Ana Katiria Suárez, la solución para que obtenga su libertad es tramitando un amparo ante el poder judicial de la Federación. Suárez añadió que estos trámites normalmente son breves, por lo que en este caso ha tardado más de lo común. Agregó que de no haber más retrasos, Yakiri saldría libre este miércoles.
El padre de Yakiri dijo que el responsable de que su hija no salga es el Juez 68 Penal, Santiago Ávila Negrón, quien desde ayer se declaró incompetente del caso, pero este martes 4 de marzo sacó el expediente de su juzgado hasta las dos de la tarde.
De esta forma, y por cuestiones administrativas del poder judicial del Distrito Federal, Yakiri Rubió no ha obtenido se libertad bajo fianza, pero se espera que con el amparo obtenga en pocas horas su libertad.
El caso de Yakiri
La joven fue encarcelada por homicidio calificado. El pasado 17 de diciembre, la Procuraduría capitalina señaló que no estaba acreditado que Yakiri hubiese sido agredida sexualmente y que había llegado al hotel donde ocurrieron los hechos, por voluntad propia, sin embargo, la defensa señaló inconsistencias en el caso.
Según José Luis Rubio, padre de la joven encarcelada, el lunes 9 de diciembre de 2013, Yakiri Rubí Rubio Aupart, de 20 años, fue secuestrada alrededor de las 20:00 horas en la colonia Doctores, por dos desconocidos. Sus atacantes la agredieron verbalmente, la amenazaron con un arma y la llevaron forzosamente a un hotel para abusar de ella.
El principal agresor y ahora occiso fue identificado como Miguel Ángel Rodríguez Anaya, quien torturó, abusó sexual y físicamente de la joven. Cuando estaba a punto de matarla, explicó el padre en diciembre, el violador la acuchilló pero la joven logró torcer la muñeca y dirigir el cuchillo al agresor para defender su vida. El criminal, herido, salió del cuarto por su cuenta y escapó.
