A casi una semana de que las autoridades del Palacio Municipal de Iguala, Guerrero, desalojaran las instalaciones como medida preventiva hoy, 22 de octubre, personas con el rostro cubierto quemaron la sede de gobierno, en protesta por los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.
Durante aproximadamente 40 minutos, los manifestantes —que marcharon desde la central de abasto hasta la Plaza de las Tres Garantías, donde se ubica el palacio— rompieron vidrios y lanzaron bombas molotov ocasionando incendios y daños al mobiliario, informaron autoridades de Protección Civil guerrerense. No se reportan personas herdias.
Los manifestantes incendiaron en la explanada una fotografía de María de los Ángeles Pineda, esposa del expresidente municipal; ambos en calidad de prófugos de la justicia.
Hay más de 35 elementos de bomberos preparados para combatir el incendio con pipas y ambulancias para poder entrar, pero el incendio continúa porque, según informó la Subsecretaría de Protección Civil, los manifestantes no les permiten el acceso.
Saquean plaza que pertenecía al exalcalde de Iguala
Los saqueos que originalmente comenzaron en el ayuntamiento de Iguala se extendieron a la Plaza Comercial Galerías Tamarindos, donde un grupo de personas saqueó aparatos electrónicos, calzado, teléfonos celulares y todo lo que estaba a la venta en aparadores.
En la Plaza se encuentran diversas tiendas departamentales de joyerías, electrodomésticos, telefonía y bancos. Los encapuchados extrajeron pantallas planas, videojuegos y otros enseres domésticos pequeños, así como teléfonos celulares.
La acción de los saqueadores permaneció impune hasta las 17 horas cuando intervino personal de la Policía Federal y logró la captura de por lo menos cuatro personas involucradas en estos hechos delictivos.
Los propios dueños de negocios aclararon que en estos hechos no intervinieron maestros disidentes ni estudiantes, sino grupos de personas que se animaron a participar en la rapiña alentados por la impunidad que prevaleció durante más de cuatro horas en el palacio municipal.
En el despliegue que realizaron los policías federales ubicaron un negocio en donde se venden micheladas, lugar que los ladrones ocasionales utilizaron para esconder parte de lo robado.
En ese establecimiento los elementos de seguridad detuvieron a cuatro personas que no justificaron la posesión de artículos nuevos y fueron llevados ante propietarios y trabajadores de los comercios destrozados para su identificación.
El despliegue policiaco se registró cinco horas después de iniciados los disturbios en la cabecera municipal de Iguala.
Con información de Milenio, Notimex y Reforma
****Nota publicada el 22 de octubre de 2014.
