El caso de los restos hallados en el municipio de Cocula, Guerrero, es “uno de los más difíciles” que científicos forenses de la Universidad de Medicina de Innsbruck han analizado.
El biológo molecular forense que lidera la investigación, Walther Parson, dijo a EFE que no pueden estimar cuánto tiempo tardarán para identificar más restos hallados en Cocula debido a que el mal estado de las muestras los obliga a utilizar una técnica de identificación de ADN más lenta.
[contextly_sidebar id=”Z8B6RE3BQg0LH5upENoFp8FtZZUIYVxc”]Aunque los científicos de Innsbruck ya identificaron los restos del normalista Alexander Mora Venancio, no pueden utilizar la misma técnica en los demás restos porque están muy calcinados.
“Las probabilidades (de éxito) no se pueden cuantificar, pero en general son escasas, porque las muestras son difíciles de analizar” debido al estado en que se encuentran, explicó Parson a EFE vía correo electrónico.
“Los desafíos están en el uso de pruebas alternativas de ADN y en otros marcadores de ADN mitocondrial. Este análisis es mucho más complejo que un análisis estándar de ADN. No puede darse una estimación exacta del tiempo que se requiere”, dijo Parson.
Apenas el 16 de diciembre, Parson dijo a Reuters que esperaban tener resultados en los próximos dos o tres meses.
Los forenses de la Unidad Médica de Innsbruck realizan pruebas mitocondriales, que se emplean para el reconocimiento de restos con alto grado de degradación, dañados o encontrados en cantidades muy pequeñas.
La prueba de ADN mitocondrial consiste en analizar la información genética que cada individuo hereda únicamente por la madre y que se encuentra en la mitocondria, órgano encargado del suministro de energía para la actividad de cada célula, donde se encuentran entre 500 y 2000 copias de ADN mitocondrial.
Los expertos aseguran que hay más probabilidades de que la información de la mitocondria sobreviva en la célula pese a condiciones ambientales, por lo que la medicina forense utiliza la prueba en las investigaciones e identificación de personas desaparecidas, desastres naturales y otras que impliquen obtener material biológico limitado.
El Laboratorio Central de ADN de Austria (Austrian Central DNA Database Laboratory) en los últimos 17 años ha resuelto 8 mil crímenes a través de pruebas forenses de ADN, y reconocido a víctimas de nueve países.
El Laboratorio es parte del Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Innsbruck, Austria, y según sus propios registros, desde que inició operaciones en 1997 ha estudiado más de 29 mil escenas de crimen y restos de víctimas como las del régimen militar chileno o las del tsunami en Asia, en donde después de 100 días del desastre natural se recogieron 400 muestras que permitieron identificar a 101 personas, el total de las víctimas que se buscaban.
Este centro austriaco se especializa en eldesarrollo de nuevos métodos y tecnologías de análisis y reconocimiento forense sobre todo para muestras dañadas, con alto nivel de degradación o muy pequeñas, pero además posee una Base de Datos de ADN que contiene los perfiles genéticos de víctimas no identificadas en escenas del crimen y de personas sospechosas de haber cometido un delito grave.
Además del reconocimiento de víctimas en el tsunami de 2004, los casos más importantes en lo que, según la misma Universidad, ha participado el Instituto son: