[contextly_sidebar id=”Nqupkp7z4poxUwE1uYV3JDoyb9PtWt5m”]En Puebla los diputados están por cerrarle el paso a los candidatos independientes, pues en la propuesta de reforma al Código de Instituciones y Procedimientos Electorales (Coipe) que se discute en estos días en el Congreso poblano, establecieron una serie de condiciones que serán difíciles, por no decir imposibles, de cumplir, como la obligación de llevar a los ciudadanos a las oficinas del Instituto Nacional Electoral (INE) a firmar el apoyo a las candidaturas.
Al respecto, el actual líder de la fracción azul en el Congreso, Jorge Aguilar Chedraui sostuvo que la dureza de la reforma es una manera de proteger a la ciudadanía de “políticos resentidos” que quieran usar la figura de independientes al no obtener la nominación en su partido de origen.
“No queremos políticos resentidos con sus partidos, disfrazados de candidatos ciudadanos o independientes; las personas que quieran ser candidatos ciudadanos deben contar con verdadera representación territorial en los lugares por los cuales se quieran postular y al igual que cualquier otros candidato tienen derechos y obligaciones”, apuntó Aguilar Chedraui.
Por su parte, Bernardo Hinojosa en declaraciones al portal de noticias Lado B, rechazó las palabras del legislador panista y aseguró que se trata de “un abuso dirigido a cerrarle la puerta a los ciudadanos”.
Lo que dice la propuesta
Para cualquier ciudadano poblano interesado en competir por un cargo de elección popular fuera del sistema de partidos la primera pared a escalar es el porcentaje de firmas de apoyo a sus aspiraciones. El aspirante deberá reunir el 3 por ciento de la lista nominal total si aspira a la candidatura a gobernador, o del municipio o del distrito si lo que se busca es pelear por la presidencia municipal o por una diputación (Artículo 201 quáter).
La obtención de firmas fue, en el proceso federal pasado, el primer gran filtro. De los seis aspirantes que buscaron competir sólo dos lograron llegar a la boleta.
Alberto Merlo Martínez, uno de los dos candidatos plantea que con la reforma que impulsan los diputados los aspirantes a pelear la gubernatura tendrán que juntar cerca de 131 mil firmas repartidas en 167 municipios, y además tendrán que convencer a cada uno de esos electores de presentarse ante el Consejo General del INE o los consejos distritales para firmar, delante de funcionarios electorales y representantes de partidos, el formato de apoyo al candidato independiente. Todo en un lapso de diez días (Artículo 202 Ter).
Esto, sostiene, disminuye la posibilidad de juntar las firmas, traslada la responsabilidad al electorado y eleva el costo monetario. “Para una persona con una jornada laboral de ocho horas o más, resultaría casi imposible tener el tiempo de ir a las oficinas del INE a dar su apoyo al aspirante independiente”.
En la opinión de Hinojosa, Puebla ha sido el estado más retrógrada dentro de las legislaciones de esta figura a nivel nacional, pues ha sido el único que pidió que en lugar de que las firmas sean recolectadas por los aspirantes, sean los propios ciudadanos los que tengan que ir al INE (consejos distritales), con credencial vigente en mano y una copia, a registrar su apoyo al candidato independiente en cuestión.
Para que cualquier ciudadano sea votado, concluyó el ex aspirante, el camino es casi imposible. Sólo se abrirán las puertas a algunas personas, pero en su opinión, bajo las mismas reglas y esquemas de los partidos. “Es una pena otra vez volver a ver al Congreso del estado obedecer interés particulares, abusivos y corruptos. Y digo corrupto porque es una desviación total de la democracia, que es votar y ser votado de entrada.”
La discusión de la propuesta está aún en discusión en comisiones, y se espera que este viernes quede concluida para pasar al pleno para su votación.
El ex candidato independiente Merlo Martínez refirió al diario Reforma que entregará una propuesta a los diputados locales para generar mejores condiciones a los ciudadanos que desean postularse a un puesto de elección popular.
