Expertos en derechos humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) pidieron el gobierno mexicano que defender el trabajo de los defensores de derechos humanos y del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), tras las acusaciones de fraude y corrupción, de defender presuntos delincuentes y de promover la impunidad realizando falsas denuncias de tortura.
[contextly_sidebar id=”KL4ybZ25BmKcgCNkoIc8yNXy9HWvT3qT”]“El Gobierno debe contrarrestar tales ataques y tomar las medidas necesarias para garantizar un ambiente seguro para las personas y la sociedad civil, libre de cualquier tipo de acoso”, dijo el Relator Especial de la ONU sobre el derecho a la libertad de reunión pacífica y de asociación, Maina Kiai.
El martes 29 de marzo, la CIDH denunció “una campaña de desprestigio en México” contra el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) y contra su secretario ejecutivo, Emilio Álvarez Icaza, contra quien se presentó una denuncia por un presunto delito de fraude en perjuicio del estado mexicano en relación con el trabajo del GIEI.
La denuncia fue presentada por José Antonio Ortega presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, pero la PGR informó que no contaba con los elementos para que procediera.
Las críticas al trabajo del GIEI atenta contra el trabajo de los defensores de derechos humanos, lo que “crea un efecto disuasivo, silenciando otros puntos de vista y expresiones de disenso por parte de quienes ejercen su derecho a la libertad de expresión y a la libertad de reunión pacífica y de asociación”, señaló el Relator Especial de la ONU sobre libertad de opinión y de expresión, David Kaye.
Michel Forst, relator especial de la ONU, dijo que las autoridades mexicanas deben reconocer que la defensa de los derechos humanos es una actividad legítima y fundamental “para fortalecer el estado de derecho, la rendición de cuentas ante la justicia y la democracia en el país”.
Los expertos de la ONU añadieron que los atentados contra los defensores de derechos humanos en México incrementan el peligro, el riesgo y la vulnerabilidad para ellos y su trabajo.
Este miércoles, el GIEI dijo que las acusaciones de Ortega solo buscaban generar el desistimiento del grupo de buscar la verdad, y que todas las mentiras que ha dicho sobre su trabajo serán incluidas en el informe final.