El ahora presidente interino de Brasil, Michel Temer, fue “informante” de Estados Unidos y envió a ese país información sobre la situación política en la nación sudamericana, de acuerdo con el portal WikiLeaks.
[contextly_sidebar id=”gLX3LQ21ilA7ulAbp6HId7yCG5zvTgqJ”]En su cuenta de Twitter, WikiLeaks hizo los señalamientos y publicó un cable que se atribuye al área de inteligencia estadounidense, donde se dan detalles del presunto reporte de Temer al país norteamericano.
Según se lee en el documento, Temer habría informado que la “desilusión” de la gente hacia Lula Da Silva y el Partido de los Trabajadores (PT) abría la puerta para que el partido Partido de Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) presentara su propio candidato a la presidencia en 2006.
“Si los números electorales de Lula no mejoran antes de las primarias del PMDB en marzo, Temer dijo que su partido podría nominar su propio candidato”, indica el documento presentado por WikiLeaks.
#Brazil‘s #Dilma slayer, now president, #Temer, passed sensitive polical info to US intel https://t.co/3l2eUdiqvy pic.twitter.com/mPpLzjKprh
— WikiLeaks (@wikileaks) 13 de mayo de 2016
En otro momento, según el mismo texto, Temer supuestamente mencionó que algunos líderes del PT habían robado dinero, no para aumentar su riqueza personal, sino para expandir el poder de su partido, lo que había aumentado la desilusión de la gente.
Brasil’s new president #Temer was an embassy informant for US intelligence, military https://t.co/3l2eUdiqvy pic.twitter.com/IUuUgHYd1e
— WikiLeaks (@wikileaks) 13 de mayo de 2016
Temer ocupa la presidencia interina de Brasil, en medio de una tormenta política después de que el Senado aprobara la apertura de un juicio político para la mandataria Dilma Rousseff, que acusa un golpe de Estado en su contra.
El Senado tiene 180 días para celebrar el juicio y decidir si la mandataria debe ser apartada definitivamente de su puesto. Mientras tanto Temer, vicepresidente de Rousseff, quedará como presidente interino.
Rousseff, cuya popularidad se ha desplomado en la peor recesión de Brasil desde la década de 1930, está acusada de utilizar trucos contables para ocultar un gran déficit en el presupuesto federal.
La oposición alega que eso perjudicó al país, pero la primera mujer presidenta de Brasil afirma que las acusaciones carecen de base y el caso está preparado para que las élites que detestan a su izquierdista Partido de los Trabajadores puedan recuperar el poder.
Con información de AP