Nota del editor: esta entrada fue publicada originalmente en ClickNecesario.com, el 13 de julio de 2016.
A veces, por andar tan clavados en la vida y quejándonos de lo viejos que somos, se nos olvida alimentar al niño o niña que todavía somos.
Porque por más que nos comprometamos a tener una tarjeta de crédito, seguimos siendo igual de bobos, divertidos y fáciles de sorprender… sólo que a veces se nos olvida.
Es así que les traemos una lista de cinco libros que pueden comprar con su dinero de adulto para el niño que todavía son. Estos se pueden leer hasta en una sola sesión y pueden regresar a ellos cada vez que sientan que lo necesiten, por si no aprendieron del error la primera vez (o sea, se van a aprender los libros de memoria).
Este es un libro para cuando se sientan oprimidos o bulleados por alguien, desde un jefe hasta una suegra. Podrás aprender los artes de la psicología a la inversa para dejar de sufrir y poner en su lugar al villano de tu vida. Aparte, esta historia de Francisco Hinojosa fue ilustrada por Rafael Barajas “El Fisgón”, para que tu parte adulta e intelectual no se sienta excluida.
Si tuviste la fortuna de crecer con Dr. Seuss, recordarás (y quizás estés de acuerdo con nosotros) lo bonito que es este libro. Si no, te lo presentamos con la promesa de que lo amarás y hasta querrás tener hijos para dárselos. Pero mejor acuérdate que tú eres muy inmaduro y cómpralo para ti.
¡Oh, cuán lejos llegarás! es un libro que te presenta el mundo tal y como es. Logra pintarte un panorama claro de lo que es la vida: altas y bajas, cambios y cambios, gente horrible y gente entrañable, incluso hay una parte dedicada a la horrible parte de la vida de hacer cola para pagar algo. No te dejes engañar por los colores, las rimas y la diversión, este libro te ayuda tanto como una buena sesión terapéutica.
El libro por excelencia del friendzoneo. En este clásico, súper corto, tierno y deprimente libro, Shel Silverstein nos enseña a amar y darlo todo sin recibir nada a cambio. Y cuando digo TODO, es TODO. Como lo dice el título, el árbol es muy (quizás hasta se pasa de) generoso con el escuincle niñito de la portada.
Ambos crecen, envejecen juntos, el niño lo visita cuando quiere, él le da todo y el niño… mejor léanlo. Igual si no se identifican con el árbol, quiere decir que ustedes son el niño malagradecido. Malos. En otros casos podría recordarte también a tus papás, hacerte sentir que eres un mal hijo y sacarte una lagrimita.
En 2009 salió la película de Spike Jonze de este libro. Como buena película basada en un libro, nos quedamos mejor con el libro… y con la música de la película. Este libro es perfecto para cuando te peleas con alguien y/o te hacen enojar.
La historia de Max, nuestro héroe, se desarrolla después de un enojo con su madre. Como lo mandan a su cuarto sin cenar, él mejor decide huir a otro mundo en donde hay seres como él (monstruosos). En este mundo se siente comprendido y le va bastante bien. A pesar del éxito obtenido, Max regresa a su cuarto y ya verán.
Una bonita historia para aprender a convivir con nuestros monstruos internos y no dejar que vengan con nosotros a la realidad, ni que convivan con los que queremos.
Este libro realmente no nos cuenta una historia: nos cuenta un sentido, el de la vista. A través de las páginas totalmente negras del libro aprendemos a sentir los colores como lo haría un ciego. Cada color es descrito con recuerdos, sensaciones y sabores, de tal manera que una persona que no ve, pueda tener una idea de lo que son los colores.
Las páginas tienen ilustraciones –negras- en relieve y todo el texto también está en braille. Una bonita manera de sorprenderte, aprender a registrar el entorno de una manera distinta e ir a tu Facebook a decir que te sientes *bendecido y agradecido* por el simple hecho de conocer los colores.
Si ustedes tienen un libro favorito para niños al que recurren en la adultez o creen que debemos conocer alguno, ¡compártanlo, por favor! Somos ñoños y amamos los libros.