[contextly_sidebar id=”TgVkv0GBjSD5bLmM6Z0YnXAR0yEKpQD5″]Elementos de la Agencia de Investigación Criminal y de la Secretaría de la Defensa Nacional detuvieron a Francisco Javier Zazueta Rosales, alias el Chimal, quien es señalado como el “posible responsable de ordenar y participar en la agresión en contra de elementos de la Sedena”, ocurrida el 30 de septiembre del años pasado, donde perdieron la vida cinco militares y 10 más resultaron heridos.
Autoridades federales informaron a Animal Político que la detención de Zazueta Rosales, a quien también se le señala como “probable responsable de controlar la venta, distribución y trasiego de droga hacia a Estados Unidos”, ocurrió en Culiacán, Sinaloa.
La Procuraduría General de la República informó que la detención se logró luego de una investigación y de la puesta en marcha de un operativo que concluyó con la captura del líder del cártel de Sinaloa “sin efectuar un solo disparo”.
Al momento de la detención, los agentes federales aseguraron dos armas largas, una corta, dos millones de pesos y equipos de radiocomunicación.
“Para deslindar responsabilidades, los detenidos, junto con lo asegurado, fueron trasladados a las instalaciones del Agente del Ministerio Público de la Federación en la Delegación de la Procuraduría General de la República correspondiente”, indicó la PGR.
La detención del presunto responsable de la emboscada a militares ocurre una semana después de que se reportaron hechos violentos en Sinaloa, los cuales fueron atribuidos por el titular de la Sedena, Salvador Cienfuegos, a la lucha entre miembros del Cártel del Pacífico por encontrar al sucesor de Joaquín el Chapo Guzmán Loera, quien fue extraditado a Estados Unidos.
El pasado 30 de septiembre, un convoy militar fue atacado por hombres armados en Culiacán, cuando trasladaban a una persona herida en una ambulancia, lo que dejó un saldo de cinco militares muertos.
Desde ese mismo día, autoridades de Sinaloa señalaron a los hijos del Chapo Guzmán como los presuntos responsables del ataque a los militares.
Quince días después de la emboscada, los hijos de Joaquín Guzmán Loera, Iván y Alfredo Guzmán Salazar, se deslindaron del ataque.
Además, la captura de Zazueta Rosales ocurre nueve días después de que los hijos del Chapo Guzmán denunciaron que sufrieron un ataque supuestamente organizado por Dámaso López, hijo del ex subdirector del penal de Puente Grande.
