Un juez federal ordenó retirar el brazalete electrónico a Elba Esther Gordillo, bajo el argumento de que este objeto le puede ocasionar problemas emocionales, a una semana de que llegó a su departamento en Polanco para cumplir con la prisión domiciliaria.
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La exlideresa del sindicato de maestros ya se había quejado que el dispositivo que le fue colocado en el tobillo le causaba problemas de ansiedad, debido a que por las noches producía vibraciones que le impedían dormir bien.
Ante ello, la maestra solicitó que se le retirara lo que en un primer momento le fue negado por la juez décimo segundo de Distrito en Amparo, la cual turnó el caso al juzgado sexto de Distrito en Proceso Penales, que advirtió a la PGR que de no retirar el brazalete se hará acreedora a una multa.
Asimismo, el juez determinó que Elba Esther pueda recibir visitas en su departamento y recibir llamadas telefónicas.
Entre las medidas de seguridad como parte de la prisión domiciliaria, además del brazalete, la fundadora del partido Nuevo Alianza tuvo que entregar su pasaporte, visa y vigilancia permanente de agentes de la Policía Federal en el departamento.
