Ante los hechos de violencia recientes en la entidad, el gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes, dijo este jueves que las autoridades no pueden evitar las ejecuciones entre delincuentes, y que tampoco están para darles seguridad a los criminales.

[contextly_sidebar id=”ap8N7lEhYyVEgEQAKiGaiMRZW7o7KU9R”]“Las ejecuciones entre delincuentes no las puede evitar el gobierno, ni estamos para darle seguridad a los delincuentes. Quien participa en actividades ilícitas sabe perfectamente bien el riesgo que corre, pero cuidado se metan con los ciudadanos de bien”, señaló Yunes durante la incineración de 400 kilogramos de cocaína decomisados en diciembre por fuerzas federales en Veracruz.

“Entendemos la preocupación de los veracruzanos por la situación de inseguridad, pero desde aquí, reunidos todos los que representamos a las corporaciones encargadas de la seguridad, les decimos que cada día hacemos un esfuerzo mayor por brindar a los veracruzanos la seguridad que merecen”, dijo.

Las declaraciones de Yunes se dan luego de que, el pasado 13 de enero, fueran hallados nueve cadáveres desmembrados dentro de una camioneta en la ciudad de Xalapa, Veracruz. Además de los cuerpos, elementos del Ejército Mexicano hallaron “dos mensajes con amenazas”, según informó AFP.

El 12 de enero, la policía municipal encontró cuatro cabezas humanas sobre el cofre de un automóvil. Y es que las disputas entre los cárteles de Jalisco Nueva Generación (CJNG), Los Zetas, creado por exmilitares de élite, y el Cártel del Golfo han convertido a la entidad jarocha en una de las regiones más violentas de todo el país.

Según el último conteo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, de diciembre de 2016 a octubre de 2017, se contabilizaban mil 514 asesinatos dolosos en todo el estado.