Las candidatas y el candidato a la Presidencia de la República en este 2024 suman gastos por más de 172 millones de pesos en el primer mes de campaña, según el Sistema Integral de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral con corte al 29 de marzo.
Claudia Sheinbaum, candidata de la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, es la que más ha reportado gastos ante el INE, con 84 millones 69 mil pesos para su promoción, e ingresos por 82.5 millones de pesos.
Por su parte, Jorge Álvarez Maynez, candidato de Movimiento Ciudadano, reporta un gasto de 61 millones 641 mil pesos e ingresos por 58 millones, y Xóchitl Gálvez, de la coalición “Fuerza y Corazón por México”, ha reportado más ingresos que gastos: su campaña ha recibido 28.9 millones de pesos y ha erogado 27 millones 120 mil pesos.
El tope de gastos para las campañas, que concluyen el 29 de mayo, es de 660 millones 978 mil pesos por cada aspirante de los partidos políticos, por lo que aún se encuentran lejos del límite permitido para sus gastos de proselitismo.
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En la revisión de los reportes que han hecho ante la Unidad Técnica de Fiscalización del INE, es notorio que cada una de las candidatas ha enfocado sus campañas en diferentes líneas.
Sheinbaum, por ejemplo, registró mayor inversión en propaganda general; mientras que Xóchitl Gálvez gastó más en promocionales de redes sociales y páginas de internet; y Jorge Álvarez Máynez gastó más en la producción de los mensajes para radio y televisión.
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¿En qué han gastado más los candidatos presidenciales?
De acuerdo al sistema de Fiscalización del INE, de los 172 millones de pesos gastados por las candidaturas presidenciales, el 49 por ciento del gasto perteneció a Claudia Sheinbaum.
La morenista invirtió más de 84 millones 69 mil pesos en su primer mes de campaña, de los cuales 47 millones 852 mil pesos se destinaron al rubro de propaganda, seguido de la propaganda en vía pública con 22 millones 961 mil pesos y Operativos de campaña, que incluyen salarios del personal que trabaja en la campaña, viáticos, inmuebles y gastos de transporte,con 7 millones 843 mil pesos.
El candidato de Movimiento Ciudadano Jorge Álvarez Maynez gastó 61 millones 641 mil 571 pesos en su primer mes de campaña, el 36 por ciento del gasto total de las candidaturas hasta ahora, dando prioridad a la promoción de mensajes en radio y televisión con 18 millones 67 mil pesos, seguido de la propaganda en vía pública con una suma de 15 millones 540 mil pesos y propaganda con 15 millones 218 mil pesos.
Por su parte, el 16 por ciento del gasto total de los aspirantes a la presidencia fue utilizado por la candidata opositora, Xóchitl Gálvez con un total de 27 millones 120 mil pesos. De los tres aspirantes, la panista es la que más ha destinado gastos propaganda hecha a través de redes sociales y páginas de internet con 14 millones 901 mil pesos.
¿Quién suma más anuncios y eventos cancelados?
Los reportes del Sistema Integral de Fiscalización también permiten conocer cuántos eventos ha registrado en agenda cada aspirante a la Presidencia, cuántos se han realizado y cuántos se han cancelado.
Mientras que Claudia Sheinbaum ha realizado 177 eventos, Xóchitl Gálvez lleva 42 y Jorge Álvarez Máynez apenas 37.
Los datos muestran que Álvarez Maynez acumuló en su primer mes de campaña 163 eventos cancelados, de los 705 eventos programados en su agenda. Y, hasta ahora, Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum no reportan eventos cancelados en el sistema de fiscalización del INE.
Por otro lado, en la biblioteca de anuncios de Meta, Xóchitl Gálvez tiene registrados 4 millones 714 mil pesos en 334 anuncios contratados desde su página oficial por montos individuales de hasta 35 mil pesos.
Álvarez Maynez sumó 4 millones 746 mil con 400 anuncios en el último mes, con costos de 1 mil pesos en adelante; y Sheinbaum 2 millones 53 mil pesos, con 3 mil 66 anuncios contratados desde los 100 pesos.
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Los recortes al presupuesto de educación superior llevaron a estudiantes, profesores y obreros a protestar en Buenos Aires y otras ciudades del país.
Fue una de las protestas más multitudinarias registradas en Argentina desde que Javier Milei asumió la presidencia del país en diciembre de 2023.
Las calles de Buenos Aires y otras grandes ciudades de Argentina se vieron abarrotadas este martes con cientos de miles de personas, especialmente estudiantes y profesores universitarios, que rechazan los recortes del gobierno a la educación superior en ese país.
Estuvieron respaldados por obreros y sindicalistas que esperan que se reviertan las reducciones de entre 60-70% del presupuesto público para las universidades.
El recorte es parte de la política de la “motosierra”, como llama Milei a su plan para reducir la participación del Estado en actividades públicas de todos los sectores, para conseguir un equilibrio fiscal en la golpeada economía argentina.
“Vamos a tener que dejar de funcionar”, advertía a una emisora local Ricardo Gelpi, el rector de la Universidad de Buenos Aires (UBA), la institución pública que cuenta con más de 300.000 alumnos y que está catalogada entre las mejores de América Latina.
Apuntó que los recortes están afectando el pago a profesores, las actividades de investigación y la atención sanitaria, pues la UBA gestiona cinco hospitales públicos.
Al grito de “La UBA no se vende, la UBA se defiende”, los miles de manifestantes avanzaban en la capital argentina desde la sede del Congreso hacia la Casa Rosada, sede de la presidencia.
Algunos jóvenes llevaban libros en las manos para manifestarse contra el gobierno de Milei, quien ganó con una holgada mayoría las presidenciales de 2023.
Las viejas generaciones también acompañaron a los estudiantes.
“Vengo para defender la universidad pública y porque mis principios están muy alejados de los del gobierno actual”, dijo Pedro Palm, un arquitecto de 82 años graduado en la UBA, a la agencia Reuters.
La protesta fue respaldada también por la Confederación General del Trabajo, la principal central sindical del país.
El plan de Milei también ha incluido el despido de miles de funcionarios, así como la eliminación de diversos programas gubernamentales.
La noche del lunes, Milei pronunció un discurso en cadena nacional en el que celebraba los logros económicos de su gobierno -como un superávit fiscal de 0,2%- como un “milagro económico” producto de sus políticas de ajuste.
“Pese a la oposición de buena parte del establishment político y económico de Argentina, a quienes sistemáticamente ponen en cuestionamiento nuestras ideas y pregonan por nuestro fracaso para volver al poder, nuestro plan está funcionando”, afirmó.
Argentina no registraba un superávit fiscal trimestral desde 2008.
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