La Villa Panamericana, que edificó la constructora Corey Integra en El Bajío, una zona cercana al Bosque La Primavera, no cumplió con las 56 condicionantes que impuso la Secretaría del Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades) al autorizar la Manifestación de Impacto Ambiental que permitió la construcción del complejo inmobiliario.
Corey Integra no ha cumplido ni con la donación de seis cuatrimotos al comité técnico del Área Natural Protegida Bosque La Primavera, a pesar de que la inversión para su edificación superó los mil 200 millones de pesos (alrededor de mil millones de dólares).
Las cuatrimotos servirían para las brigadas anti incendios y a las labores de inspección y vigilancia del bosque.
Así mismo, la empresa privada estaba obligada a presentar un plan de acciones y propuestas para proteger la fauna y la flora.
Corey Integra debía también presentar un convenio con el Comité Técnico para la Administración del Bosque en el cual se especificara los mecanismos de colaboración para vigilar el área natural protegida y en combatir los incendios, que aqueja el bosque cada año.
La Semades autorizó, el 7 de diciembre de 2009, la construcción de cuatro edificios con 951 departamentos de lujo, enclavado en el bosque y es una zona de amortiguamiento de La Primavera, considerada el pulmón más importante del área metropolitana de Guadalajara.
Son 17 hectáreas las que fueron afectadas por el mega-proyecto privado a pesar de la protesta de los ecologistas por el daño ambiental.
José Luis Gámez Valdivia, director del Bosque La Primavera, dice que la constructora Corey Integra dejó a un lado la ecología y se enfocó en terminar las obras de infraestructura.
“Los de la constructora lo único que nos han pedido son prórrogas para cumplir las condicionantes ambientales”, señaló el funcionario y confía en que se solventarán estos requisitos pero no tiene fecha.
El pasado 4 de octubre, el Comité Organizador de los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011 (Copag) finalmente entregó el hotel de los atletas a la Odepa, que encabeza Mario Vázquez Raña. Ese día, los albañiles seguían trabajando en la construcción de al menos seis restaurantes. Los teléfonos aún no tenían conectadas las líneas.
Aun así, Vázquez Raña elogió a la constructora por superar uno de los mayores retos en la organización de los Juegos Panamericanos en Guadalajara. “Vine aquí hace algún tiempo y casi lloré al ver cómo estaban las obras (con retrasos). Estoy impresionado con la rapidez en que se consiguieron las cosas”, señaló conmocionado el dirigente de la Odepa.
¿Ecológica?
El holandés Willem Nicolaas Van Der Kaaij, alcalde de la Villa Panamericana, informó que el hotel de los atletas tendrá un pabellón internacional, lavandería, gimnasio, comedios, discoteca, comedor, policlínica y una capilla ecuménica. Además, tendrá áreas verdes de uso común, estacionamientos subterráneos, alberca y plazoletas.
Van Der Kaaij presumió que la Villa Panamericana será ecológica, por utilizar muebles de cartón reciclado y hasta pintura biodegradable.
Tan ecológicos son los muebles que para su fabricación no se cortó ningún árbol, dijo. El barniz que se utilizó es a base agua que no contamina el ambiente.
Los ecologistas no piensan lo mismo. Estas declaraciones las consideran una burla. Raquel Gutiérrez, directora del Instituto de Derecho Ambiental (Idea) y Mario Silva, del Colectivo Ecologista Jalisco, dicen que es lamentable la confusión de algunos funcionarios en cuanto al tema ambiental.
Aclaran que ecología es una ciencia y no se puede confundir con la jardinería. “Plantar arbolitos y utilizar supuestos materiales ecológicos no garantizan de ninguna forma que la Villa sea una edificación sustentable y ni compensan el daño irreversible al ecosistema de La Primavera”, señala Silva.
Los deportivas viven en un hotel en medio del bosque, “pero se nos olvida que es un suicidio para todos los que habitamos en la metrópoli”, dice, por su parte, Gutiérrez Nájera, una de las legendarias defensoras de los bosques en Guadalajara.
Las delegaciones deportivas no sufrirán el tráfico para llegar al Estadio Omnilife pues estarán a un kilómetro. En este sitio, propiedad del empresario Jorge Vergara, y dueño de las Chivas, uno de los equipos de futbol más populares de México, se llevará a cabo la inauguración y clausura de los Juegos Panamericanos.
Deterioro de El Bajío
En la época dorada de la zona conocida como El Bajío (al poniente de Guadalajara) tenía sembradíos y servía para la recarga de los mantos acuíferos de La Primavera y del bosque Los Colomos, de mucha relevancia para el ecosistema. Desde hace años, empezó la degradación de esta zona ya que el ayuntamiento de Zapopan permitió la construcción del Estadio Omnilife y de varios fraccionamientos privados como VillaBosque, que consta de 650 viviendas, un centro comercial y la Villa Panamericana de 951 departamentos.
Alejandro Cárdenas Ochoa, presidente del Parlamento de Colonias que también defiende el medio ambiente, dice que la peor decisión de las autoridades locales fue permitir la Villa Panamericana en el Bajío.
Gutiérrez Nájera también preside el Consejo Consultivo de la región Occidente de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). “Desde el 2010, advertimos de los graves daños irreversibles al medio ambiente. No nos escucharon. De manera ilegal y tramposa, la Semades (instancia ambiental de Jalisco) permitió la urbanización de esta zona, aunque no era de su competencia”.
El Consejo Consultivo de la Semarnat denunció que el proyecto inmobiliario depreda la superficie de amortiguamiento y captación de agua pluvial que surte varios mantos acuíferos de Guadalajara y se pisotean tres decretos presidenciales que protegen la zona.
Alejandro Cárdenas afirma que El Bajío tiene una importancia hidrológica vital para la metrópoli. “Ya se dio el primer paso, dudo mucho que las autoridades municipales y estatales impidan la degradación en escalada con la urbanización de El Bajío. No puedo creer la permisibilidad de las autoridades para que una empresa privada dañe de esta forma”.
Con el apoyo del Parlamento de Colonias, los vecinos del Fraccionamiento Rancho Contento, que viven cerca donde se edificó la Villa, interpusieron juicios legales por la violación al uso de suelo. Lograron una suspensión provisional del Tribunal de lo Administrativo del Estado (TAE).
De hecho, el tribunal, suspendió por unas horas la construcción del complejo habitacional el pasado 28 de abril. La constructora Corey Integra logró revertir la situación legal.
Para el ambientalista Mario Silva, la palestra internacional de los Juegos Panamericanos permitirá como un medio de denuncia de los problemas y fallas sobre proyectos panamericanos que afectaron los ecosistemas.
#YoSoyAnimal
¡Agrega uno!