La activista Norma Andrade, presidenta de la organización Nuestras Hijas de Regreso a Casa, abandonó el hospital donde era atendida, luego de la agresión que sufrió el viernes en calles del Distrito Federal.
Autoridades y familiares informaron que fue dada de alta sin dar a conocer su paradero, e indicaron que durante el tiempo que continúe en la Ciudad de México contará con vigilancia de la Policía de Investigación.
Comentaron que la activista se encuentra fuera de peligro, ya que la lesión que sufrió en el lado derecho del cuello y llegó hasta la mejilla no afectó ningún órgano, por lo que su evolución es favorable.
Como parte de las investigaciones ya fueron solicitados a la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF) los videos de las cámaras de vigilancia instaladas cerca del lugar de los hechos, a fin de analizar los movimientos de personas y vehículos.
En tanto, Norma Andrade no regresará al domicilio donde fue agredida y las autoridades mantendrán sigilo en torno a su paradero para garantizar su seguridad.
Notimex