El empresario Eligio Ibarra Amador, quien el año pasado llevó a la cárcel a 10 agentes federales acusados de secuestro y extorsión, fue encontrado asesinado el jueves pasado al interior de su vivienda ubicada en Ciudad Juárez.
Según reportó la Fiscalía estatal de Chihuahua en Juárez el hombre de 62 años fue hallado dentro de su casa en la colonia Las Margaritas en la parte norte de Ciudad Juárez con heridas y el 70% de la superficie corporal calcinada.
Aunque ni la Procuraduría General de la República, ni la fiscalía en Chihuahua confirmaron la identidad de Ibarra como la persona que denunció a los policías federales, Gustavo de la Rosa Hickerson, visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, confirmó que Ibarra fue el empresario que hizo la denuncia.
“Él (Ibarra) vino a Juárez porque tenía una audiencia judicial programada para el próximo martes”, explicó De la Rosa. “Él no tenía ningún tipo de protección. (Su muerte) es un golpe a la confianza de los ciudadanos”, agregó.
En septiembre del año pasado, 10 policías federales fueron arrestados y acusados de varios delitos de extorsión, secuestro, lesiones, abuso de autoridad, así como la posesión de la heroína y la marihuana.
Ese mismo mes el Juzgado Quinto de Distrito dictó auto de formal prisión a los 10 policías federales por los delitos de extorsión y privación ilegal de la libertad.
Los agentes federales involucrados fueron el comandante Reyes Flores Santiago, y los oficiales Marcelo Ramírez Xolo. Olegario Hernández Ramos, Agustín Tapia Celis, Nicasio García Alvarado, Alejandro López Morales, José Juan Fuentes Rodríguez, Miguel Ángel Cruz, Raúl Carrillo Pérez e Isaac Moreno Hernández. Todos ellos permanecen detenidos en prisión.
El arresto de los federales se produjo después de que el dueño de negocio de autopartes –Ibarra- acuso a los policías de secuestrarlo y torturarlo porque se negó a pagarles la “cuota”.
En una entrevista radiofónica realizada hace unos meses, el hoy occiso reveló que el día en que los agentes federales se metieron a su casa fue el 17 de septiembre del 2011. Lo sometieron a golpes, le pusieron una bolsa en la cabeza y le exigían dinero para no acusarlo de tener droga y armas en su vivienda.
Con información de El Paso Times y El Norte
