Milenio destaca que testigos de oídas es lo único que tiene la Procuraduría General de la República (PGR) para mantener arraigado a Tomás Ángeles Dauahare, ex subsecretario de la Defensa Nacional, pero no conocen al general y han aportado fechas de reuniones de éste con narcotraficantes cuando ni siquiera se encontraba en el país.
La esposa del militar, Leticia Zepeda Contreras, dijo que ella y su familia son objeto de persecución, pues no solo su marido está detenido por testimonios falsos de los testigos protegidos (los nombres clave son Jennifer yMateo), sino que ahora una propiedad que heredó de su madre hace 10 años les fue asegurada por la PGR.
Indicó que Jennifer ha manifestado ante el Ministerio Público federal nunca haberse reunido con Ángeles Dauahare, y lo que sabe de él es por dichos de otros, mientras que Mateo le imputó reuniones en el Distrito Federal, cuando el general ya estaba retirado y se encontraba fuera del territorio nacional. Lo anterior, agregó Zepeda Contreras, se ha acreditado ante la PGR.
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