[contextly_sidebar id=”e46cf7786de72d1872a71eb287cbf944″]La empresa francesa Systra, contratada por el Gobierno del Distrito Federal para analizar las fallas de la Línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo Metro (STC), determinó en su informe final que el origen del problema en la Línea fue la incompatibilidad entre las ruedas y los rieles, pues los trenes férreos son españoles y los rieles, franceses y polacos. A tres meses del cierre parcial de la Línea 12 del Metro, el informe también determinó que las fallas se agravaron por el mal trazo en el diseño de las curvas menores a 350 metros, así como que el balasto de caliza fue uno de los elementos que causó el desgaste ondulatorio. La velocidad con que se manejaron los trenes y el peralte pronunciado también intervinieron en las fallas de la Línea. En el informe de 160 hojas, con fecha del 6 de junio de 2014, se lee: “Además esta interfaz riel/rueda es delicada dado que el sistema de vía férrea es por concepción el de un metro mientras tanto el material rodante tiene más características de tren suburbano. Por fin, el problema fue agravado por un sistema de lubricación embarcado en los trenes que presenta deficiencias de funcionamiento”. CAF niega la incompatibilidad de los trenes La empresa española Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) está dispuesta a que los trenes que proveyó para la Línea 12 sean sometidos a un peritaje técnico independiente que garantice un análisis confiable para comprobar que son compatibles con los rieles. CAF enfatizó que existe una compatibilidad de los trenes, lo cual probó con la entrega de expedientes e inspecciones físicas. “CAF ha aportado contundente evidencia científica para probar la compatibilidad de los trenes suministrados para la Línea 12 del Metro y está dispuesta a someter a controversia un peritaje técnico independiente que garantice un análisis confiable”, indicó la empresa. Como parte de su postura sobre el informe de Systra que indica la incompatibilidad, expuso que los trenes férreos para la Línea 12 se construyeron con las características proporcionadas por el STC Metro, mediante el contrato que se firmó el 31 de mayo de 2010. Esos convoyes, de acuerdo con CAF, fueron sometidos a pruebas técnicas estáticas y dinámicas, así como a análisis de sus sistemas y subsistemas. La incompatibilidad de los trenes ocurre porque no hay un contacto adecuado entre la rueda y el riel, lo que derivó en el desgaste ondulatorio. Aquí puedes ver el informe final de Systra:

Este 11 de junio, el jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera Espinosa, informó que en su momento será necesario modificar las curvas uno y dos de la Línea 12. El mandatario local manifestó que hasta que Systra certifique que la Línea 12 puede operar con seguridad, se reanudará el servicio en el tramo que se encuentra detenido; dicha empresa también tendrá que señalar las acciones inmediatas y de largo plazo que se tendrán que llevar a cabo. La noche de ayer, 10 de junio, la Comisión de Investigación de la Línea 12 del Metro rindió su primer informe ante el pleno de la Asamblea Legislativa, en el que reconoció que existe responsabilidad por deficiencias técnicas, sin mencionar nombres de involucrados. Se informó que como lo adelantó el presidente de dicha instancia, Jorge Gaviño, las identidades de los involucrados se darán a conocer en un informe posterior para deslindar responsabilidades administrativas, jurídicas y financieras.

En tanto, el documento menciona como responsables al consorcio constructor integrado por las empresas ICA, Carso y Alstom; así como de la empresa constructora de los trenes, la española CAF, y los funcionarios del Proyecto Metro y del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro.

Sobre el desgaste ondulatorio en la obra férrea, indica que se agravó por la falta de previsión y de mantenimiento, además de que hubo una descoordinación de origen, porque mientras la dirección del Metro asignó la obra, Proyecto Metro rentó los trenes con la falta de compatibilidad.

Con información de Milenio.