Ángel Amílcar Colón, migrante hondureño encarcelado hace cinco años acusado de delincuencia organizada, acopio de armas de uso exclusivo del Ejército y delitos contra la salud, fue liberado porque la Procuraduría General de la República (PGR) no encontró pruebas para culparlo.
En conferencia de prensa, la abogada Denise González Núñez del Centro ProDH dijo que Ángel Amílcar exigirá la reparación del daño a las autoridades.
El caso y las irregularidades
[contextly_sidebar id=”9UN4Q3dATkp0yx9qk3qErIHU0vgpheIk”]Hace cinco años, Ángel Amílcar fue detenido junto a otras 10 personas durante un operativo federal. El migrante hondureño denunció que un coyote lo encerró en una casa, prometiéndole que lo pasaría a Estados Unidos.
En el inmueble, las autoridades federales hallaron armas y drogas. Sin embargo, ninguna de las pruebas presentadas por el Ministerio Público señalaron un vínculo entre Ángel y los demás detenidos, las armas o las drogas, así como la comisión de las actividades delictivas que se le imputaban.
La defensa de Ángel Amílcar acreditó irregularidades en la consignación y violación de al menos cuatro derechos:
En septiembre pasado, el último peritaje presentado ante la PGR acreditó que Ángel Amílcar sufrió discriminación y tortura en las instalaciones de la Policía Federal, la PGR y militares.
El Centro ProDH, que llevó la defensa de Ángel Amílcar, publicó un video sobre los primeros momentos de libertad del migrante hondureño: