“Liberados BG Alzate, abogada (Gloria) Urrego y cabo (Jorge) Rodríguez en perfectas condiciones y esperando condiciones climáticas para regreso a sus familias”, escribió el presidente Juan Manuel Santos en su cuenta de Twitter.

El 16 de noviembre, Alzate y sus dos acompañantes cayeron en poder de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el departamento de Chocó, en el oeste colombiano.

El jefe negociador de la guerrilla, Iván Márquez, dijo desde La Habana que la liberación se registró hacia las ocho de la mañana (1300 GMT) en el caserío de Vegaez, a orillas del río Arquía, en medio de difíciles condiciones climáticas que han impedido la operación de los helicópteros.

Alzate -el militar de mayor rango en caer en manos de las FARC- y sus dos acompañantes fueron entregados al Comité Internacional de la Cruz Roja por el jefe rebelde alias “Pastor Lape”, quien viajó desde Cuba hasta Chocó, indicó Márquez.

La esposa del general, Claudia Farfán, celebró en diálogo telefónico con The Associated Press la noticia. “Estoy infinitamente feliz. Volví a sonreír”, dijo.

Farfán declaró haber recibido una llamada del presidente Santos en la cual le aseguró que su esposo “estaba bien” de salud.

Según información suministrada por la oficina de prensa del ejército colombiano, Alzate será trasladado desde Quibdó, capital de Chocó, hasta el Hospital Militar en Bogotá para su valoración médica. El parte de los galenos se podría conocer en la tarde de este domingo.

Como consecuencia de la retención de Alzate, el presidente Santos suspendió temporalmente las negociaciones de paz, que desde noviembre de 2012 su gobierno desarrolla en Cuba con las FARC para tratar de poner fin a medio siglo de conflicto armado interno.

“Ahora tendremos que rediseñar las reglas de juego porque un proceso de paz que ha llegado al punto en el que se encuentra no puede estar sometido a ningún tipo de acciones precipitadas e irreflexivas que aplacen el advenimiento de nuestra reconciliación”, sostuvo Márquez en un comunicado.

Agregó que “invitamos al presidente Santos para que, con la mano en el corazón… piense que no podemos darle más largas al absurdo de unos diálogos de paz en medio de la guerra”.

El jefe de Estado ha dicho que una vez liberado Alzate sus delegados en el proceso de negociación regresarían de inmediato a La Habana para reanudar las conversaciones.

No está claro aún qué estaba haciendo el general en esa peligrosa zona de Colombia sin su esquema de seguridad. Varios legisladores han dicho que, apenas sea liberado, deberá ofrecer explicaciones al Congreso.

Alzate, de 55 años, es un prestigioso estratega de contrainsurgencia que en enero fue nombrado por Santos comandante del recién creado grupo Titán para luchar contra la guerrilla en Chocó.

El martes las FARC liberaron a dos soldados retenidos el 9 de noviembre en el noreste colombiano.

The Associated Press*