“No todo se puede resolver a balazos, sabemos que hay cosas de inseguridad que tienen fondo social. En lo que nos toca, no hay que dejar que los niños dejen la escuela”, señaló el alcalde de Pungarabato, Guerrero, Ambrosio Soto, quien agregó que ha recibido amenazas de presuntos integrantes del crimen organizado.