[contextly_sidebar id=”qsIR2s8QmENXH2OjhOpRi1TikHWhsRaJ”]Durante el primer año de Méxicoleaks, los medios y organizaciones sociales que la integran han publicado 11 investigaciones periodísticas –realizadas de manera conjunta e individual– que han revelado información de interés público.
Animal Político, Aristegui Noticias, Más de 131, Periodistas de A Pie, Poder, Proceso y Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D) han trabajado en alianza con la intención de fomentar la participación ciudadana, la rendición de cuentas y combatir la corrupción a partir de la denuncia.
Desde el 10 de marzo de 2015, los ciudadanos han tenido a su disposición una plataforma digital independiente para filtrar de manera anónima y segura, información referente a posibles actos ilícitos de las autoridades.
El balance hasta el momento es positivo: los ciudadanos han usado la herramienta. Han mandado documentos y material audiovisual que dieron pie a reportajes de investigación de mediano y largo aliento.
La naturaleza de la plataforma impuso a sus integrantes una forma de trabajo que privilegia la verificación a la inmediatez y, sobre todo, la protección a las fuentes que filtran la información.
Cuando los medios y organizaciones reciben documentación, valoran si se trata de información de interés público y con relevancia periodística. Una vez definidos esos criterios, los periodistas verifican la autenticidad de la información y desarrollan la investigación.
El trabajo más reciente publicado por seis integrantes, revela que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) dio permiso para la construcción de un centro comercial en la zona arqueológica de Valle de Bravo.
El objetivo principal para que los medios y organizaciones trabajen en conjunto y publiquen de manera simultánea es que el impacto de la información sea amplificado al máximo, tanto a nivel mediático como civil y legal.
Además, se trata de un esfuerzo inédito en el país, en el cual medios con distintas líneas editoriales y audiencias trabajan en conjunto, ponderando la información a la competencia.
Durante este año, los integrantes han hecho un periodismo que busca fortalecer la democracia, la libertad de expresión y la rendición de cuentas en el país. Condiciones indispensables en un contexto como el mexicano, donde existen políticos inmiscuidos en redes de corrupción y hay atentados a los derechos ganados como el acceso a la información y la libertad de expresión.
Méxicoleaks también significa un esfuerzo por impulsar la cultura de la filtración anónima, acercando a los ciudadanos las tecnologías de seguridad digital diseñadas exclusivamente para esta práctica.
La plataforma funciona a través del navegador Tor y de herramientas de encriptación para maximizar la protección de la identidad del informante y que nadie, incluidos los medios receptores, pueda saber el origen de la información.
Además, la Constitución reconoce la libertad de expresión, los derechos a la información y el secreto periodístico. Los medios de comunicación tienen la obligación y el derecho de proteger la identidad de sus fuentes, incluso dentro de un procedimiento legal.
Méxicoleaks es impulsado por la organización holandesa Free Press Unlimited, dedicada a apoyar a periodistas de diferentes países del mundo para construir un mecanismo de comunicación con las fuentes de información de manera segura, como ya han hecho en África y Holanda.
