El exgobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina, acudió este martes 9 de agosto a la audiencia de imputación de cargos, después de que la Fiscalía Anticorrupción en la entidad señalara su presunta responsabilidad en los delitos de peculado y daño al erario público, por la entrega de incentivos irregulares a la empresa coreana KIA.
[contextly_sidebar id=”0txpRvoX9FNu9goZ8fmv7lFYKqkYxtTn”]“No hemos cometido alguno y lo vamos a demostrar, todo lo que es cuestión legal está en manos de los abogados, esto es un tema que yo entiendo que genera mucha expectación”, expresó Medina (gobernó de 2009 a 2015) antes de entrar al Palacio de Justicia.
“Confiamos en las autoridades del Poder Judicial del Estado y que esto se lleve de manera objetiva, insisto, tenemos la conciencia tranquila”, agregó el político priista.
El juez de control determinará si hay elementos para iniciar un proceso.
El pasado 28 de julio, Medina no se presentó a la audiencia, ya que un juez le otorgó una suspensión provisional.
Después solicitó una medida similar, pero se le negaron, por lo que en esta ocasión sí acudió a comparecer.
El gobierno de Nuevo León ha informado sobre el embargo de bienes de 11 exfuncionarios estatales, entre ellos Medina, como parte de los resultados de la llamada “Operación Tornado”, una investigación sobre hechos relacionados con los delitos de peculado, daño patrimonial, ejercicio indebido de funciones, ejercicio abusivo de funciones y coalición.
Un juez ya consideró que hay suficientes elementos para iniciar una investigación en contra de Rodolfo Gómez Acosta, quien fue tesorero durante el gobierno de Medina, por peculado, ejercicio indebido de funciones y delitos contra el patrimonio estatal, que habrían ocasionado un quebranto de 3 mil 683 millones 504 mil 678 pesos.