El 11 de octubre de 2011 un barco de madera que transportaba refugiados sirios naufragó en costas de Italia. El saldo fue de 268 personas muertas, 68 de ellas niños. Sin embargo, el naufragio pudo evitarse.
De acuerdo con audios dados a conocer por el medio italiano L’Espresso, un hombre que viajaba en un barco de madera con 480 refugiados llamó a la Guardia Costera Italiana.
En el audio se escucha al hombre decir a la operadora “por favor, dense prisa, el agua está entrando, estamos en una verdadera emergencia”. La operadora le pide su ubicación en repetidas ocasiones.
En una segunda llamada, le piden al hombre llamar a Malta, “que está más cerca”. Cuando llama a Malta, le responden que están próximos a Lampedusa.
De acuerdo con información de El País, las autoridades italianas evaden durante cinco horas el rescate de los tripulantes del barco de madera, hasta que el barco de guerra italiano Lybra llega al lugar, cuando la embarcación ya ha volcado.
Con información de L’Espresso y El País.