El Estado mexicano tiene una deuda con los familiares de 32 mil personas desaparecidas y de las víctimas de homicidios, afirmó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
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El organismo reclamó que las familias de las víctimas reciben un trato insensible por parte de las autoridades.
De acuerdo con la Comisión, en diversos casos las víctimas, además de los daños físicos y/o psicológicos sufridos por la violación a sus derechos humanos, enfrentan revictimización institucional al acudir ante la autoridad ministerial para denunciar los hechos, al ser sometidas a interrogatorios y recibir trato insensible.
Además, refirió que la investigación del delito no se realiza con diligencia, inmediatez y de manera exhaustiva, lo que provoca incertidumbre e impunidad.
En el marco del Día Internacional del Derecho a la Verdad, la Comisión aseveró que el acceso a la justicia es un mecanismo de reconciliación entre autoridades y la sociedad.
“El derecho a la verdad tiene un referente social, debido a que la sociedad aspira a conocer las causas de crímenes aberrantes como ejecuciones arbitrarias, desapariciones forzadas, secuestros de menores de edad o tortura, por lo cual es necesario, como lo señala la Asamblea General de la ONU, promover la memoria de las víctimas de violaciones graves a los derechos humanos y la importancia del derecho a la verdad y la justicia”.
En un comunicado, la CNDH exigió a las autoridades de los tres niveles de gobierno, que tienen recomendaciones parcialmente cumplidas, que asuman sus obligaciones para con las víctimas de violaciones a derechos humanos, para que se conozca la verdad, se sancione a los responsables, se les repare el daño y se establezcan las garantías de no repetición.
