El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) aseguró que Texcoco es la mejor opción para continuar con la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), aunque recomendó seis acciones a realizar, como la revisión de costos y el financiamiento.
El presidente del CCE, Juan Pablo Castañón, afirmó que la cancelación del proyecto actual significaría una pérdida de 120 mil millones de pesos. Una tercera parte de este monto sería por penalizaciones por cancelaciones de contratos.
Dijo que este es un proyecto que beneficiará al turismo y al comercio, generará beneficios por más de mil millones de dólares al año y mejorará los costos para las aerolíneas y pasajeros, así como a la conectividad.
Además, continuar la construcción del aeropuerto, también ayudará a mantener la reputación del país frente a las inversiones nacionales y extranjeras.
“El nuevo aeropuerto posee ventajas en Texcoco en términos de capacidad de transporte de pasajeros, ya que podría llegar hasta los 135 millones por año, en contraste con el máximo potencial de 65 millones de la opciones combinadas entre el actual aeropuerto y Santa Lucía”, señaló Castañón.
Los empresarios se reunieron hoy con el próximo Secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, a quien le dieron a conocer un estudio sobre la viabilidad del nuevo aeropuerto.
El estudio de la iniciativa privada fue elaborado por 30 especialistas y coincide con los puntos de vista emitidos por colegios y asociaciones de ingenieros.
Las seis acciones que los empresarios recomendaron son las siguientes:
- Mantener la obra en donde se está realizando para garantizar la demanda actual y futura para los próximos 50 años.
- Continuar la obra del NACIM, revisando los costos de materiales siempre y cuando no quede comprometida la funcionalidad de aeropuerto.
- Revisar el esquema de financiamiento de la obra mediante la bursatilización de la deuda.
- Aumentar el alcance social del proyecto a través de zonas de alto impacto, desarrollo y generación de empleos en los municipios aledaños, que son zonas de alta marginación.
- No suspender la obra, pues su costo en tiempo y finanzas es muy alto.
- Considerar las implicaciones legales y financieras del aeropuerto en construcción, las consecuencias con acreedores y contratistas, y el riesgo reputacional de proyectos como éste .
