El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, acusó este lunes que los políticos neoliberales apostaron por la destrucción de la industria petrolera nacional, pero antes de que se consumara, dijo, ocurrió el “milagro” del 1 de julio, fecha en que ganó las elecciones.
“Fue como un milagro, porque ya cuando estaban a punto de consumar la destrucción de la industria petrolera y de acabar con la economía nacional, tocó la campana, sonó la alarma el 1 de julio del año pasado, y el pueblo decidió por un cambio verdadero”, dijo López Obrador en un evento en el estado de Hidalgo, al cumplirse 81 años de la expropiación petrolera.
“Hemos hecho el compromiso de que vamos a rescatar de nuevo a la industria petrolera nacional. No les dio tiempo de llevarse todo, porque entregaron contratos, pero sólo comprometen el 20 por ciento de todo el potencial petrolero, sólo el 20 por ciento, 80 por ciento sigue estando bajo dominio de la nación y así continuará”, agregó.
Al criticar la reforma energética del sexenio anterior, López Obrador dijo que no serán cancelados los contratos energéticos con privados, aunque criticó que con su participación no aumentó la producción petrolera del país.
“Se van a respetar esos contratos y los vamos a poner a competir, porque les vamos a demostrar que vamos a hacer más eficiente a Pemex que las empresas particulares”, dijo el mandatario federal.
“Ojalá y algún día inviertan como ofrecieron y que extraigan petróleo, porque hasta ahora no ha habido nada. Engañaron, dijeron que con la llamada Reforma Energética, como aquí se mencionó, íbamos a estar extrayendo tres millones de barriles diarios”, agregó.
“¿Cuánto estamos extrayendo? Como aquí se dijo, un millón 700 mil barriles. Se cayó la producción petrolera desde que se aprobó la Reforma Energética, a la fecha en 800 mil barriles diarios, un rotundo fracaso, no aumentó la producción ni de petróleo, lo mismo con las gasolinas, estamos produciendo menos gasolinas”.
Al continuar con su crítica al abandono de Pemex, López Obrador dijo que en una inspección en la refinería de Tula, encontraron “fierros viejos que no han recibido mantenimiento durante mucho tiempo”, por lo que a su parecer es heroico lo que logran hacer los trabajadores petroleros.
El gobierno mexicano se ha propuesto rescatar Pemex, que considera un baluarte de soberanía nacional, con un aumento de su presupuesto anual y un plan de ayuda adicional de unos 5,500 millones de dólares anunciado en febrero. La Secretaría de Hacienda mantiene abierta además la posibilidad de dar mayor apoyo financiero a la compañía.
Pero con una deuda que rebasa los 100 mil millones de dólares, las agencias de calificación crediticia consideran que esa ayuda a Pemex es insuficiente. Fitch, que rebajó en enero la nota de la empresa en dos escalones, estima que la inversión adicional debería estar entre 12,000 y 17,000 millones de dólares anuales.
Además, diversos analistas han puesto en duda que el plan de construir una refinería en Dos Bocas, Tabasco, sea la medida más adecuada para la situación financiera de emergencia que enfrenta Pemex.
Con información de AFP
