La embajadora de México en Bolivia, María Teresa Mercado, arribó durante la tarde de este martes a la Ciudad de México tras ser expulsada por el gobierno boliviano luego de un incidente protagonizado por diplomáticos españoles en su residencia, donde están asilados colaboradores del expresidente Evo Morales, dijo la policía.
Después de aterrizar en suelo mexicano, la diplomática fue recibida por el subsecretario para América Latina, Maximiliano Reyes-Zúñiga con quien conversó sobre lo ocurrido en el país sudamericano.
En la cuenta de Twitter de la SRE se compartieron fotografías de ambos funcionarios.
El subsecretario @maximilianoreyz recibió a la embajadora @mtmercado2002 en la #CDMX, donde mantuvieron un encuentro para conocer de viva voz los últimos acontecimientos en Bolivia.
El @GobiernoMX reitera su estrategia de defensa del derecho internacional y diálogo diplomático. pic.twitter.com/HQZebflWjm
— Relaciones Exteriores (@SRE_mx) December 31, 2019
La diplomática salió por la mañana de Bolivia con destino a México, luego de ser declarada por la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, como “persona non grata” y recibir un plazo de 72 horas para salir del país.
De acuerdo con medios bolivianos, Mercado dejó la residencia ubicada en la zona sur de la capital boliviana durante las primeras horas de este martes.
La embajadora fue escoltada por una caravana de automóviles diplomáticos y de seguridad hasta el aeropuerto de El Alto donde sola tomó un vuelo comercial alrededor de las 7:50 horas, tiempo local.
El vuelo partió rumbo a Lima, Perú, donde tras una escala viajará a Guayaquil, en Ecuador, y luego el tramo final que la trasladó a la Ciudad de México.
Fuentes de la cancillería detallaron a Notimex que la embajadora llegó alrededor de las 3:30 de la tarde a territorio mexicano.
Mercado fue declarada el lunes persona “non grata” tras denunciar que diplomáticos de la embajada de España, junto a personal de seguridad encapuchado y aparentemente armado llegaron sin explicaciones a la legación mexicana, en un barrio acomodado de la ciudad de La Paz.
Según el gobierno, la acción buscaba evacuar al exministro de la Presidencia Juan Ramón Quintana, brazo derecho de Morales desde que llegó al poder en 2006.
Mercado dijo antes de salir, desde su cuenta personal en Twitter, que estaba “orgullosa de servir a (su) país y de sus principios y tradición de asilo”. La embajadora también agradeció las palabras del canciller mexicano Marcelo Ebrard, que valoró su trabajo al mando de la delegación diplomática en La Paz.
Ebrard manifestó, también en Twitter, su reconocimiento a “la valiosa actuación de la embajadora María Teresa Mercado en Bolivia, quien ha cumplido cabalmente representando a México y su causa en favor del asilo y la paz”.
“Será siempre timbre de orgullo su entereza y apego a la mejor tradición de política exterior de nuestro país”, añadió.
México dijo que la expulsión de su embajadora fue una “decisión de carácter político”, aunque no tiene intención de romper relaciones diplomáticas con Bolivia.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador denunció varias veces que su embajada sufre de “hostigamiento”, pues su acceso está controlado por policías de seguridad y vecinos.
Tras la salida de Mercado, la representación diplomática quedó en manos de la ministra Ana Vallejo.
En la residencia mexicana encontraron asilo entre nueve y diez exfuncionarios de Morales, investigados por “sedición y terrorismo” por la resistencia que siguió a la dimisión de Morales el 10 de noviembre, cuya represión causó más de tres decenas de muertos.
Con información de Notimex.