Habitantes de dos municipios de Oaxaca agredieron e impidieron que trabajadores del gobierno desinfectaran las calles para evitar la propagación del COVID-19.
El primer caso se dio en San Antonio de la Cal, donde los pobladores aseguraron que los empleados que desinfectaban la zona en realidad esparcían el virus del COVID.
De acuerdo con Quadratín Oaxaca, los habitantes retuvieron a los trabajadores y se manifestaron frente al palacio municipal exigiendo que se frenaran estas labores.
Además golpearon con palos las camionetas donde se trasladaban el personal y amenazaron con quemarlas si insistían en desinfectar.
Después de unos minutos, las autoridades cedieron y los empleados se retiraron de San Antonio de la Cal escoltados por policías municipales.
Un segundo caso se registró en el municipio Nazareno Etla, donde un habitante amenazó con un arma de fuego a dos trabajadores que desinfectaban las calles.
La tarde de este miércoles, mientras desinfectaban, los empleados invitaron a un grupo de personas que estaba en la calles a usar cubrebocas.
Uno de los hombres se molestó por el exhorto, por lo que se acercó a los empleados y los amenazó con una pistola para correrlos del lugar.
Hasta el momento, las autoridades de Oaxaca no se han pronunciado con relación a estas agresiones.
Al momento, Oaxaca es uno de los estados con menos pacientes con COVID-19, con poco más de mil casos confirmados y 100 muertes.
