Llegar tarde a una cita, al trabajo o al colegio porque el Metro de la CDMX se retrasó no es una novedad. Prácticamente todos quienes en alguna ocasión han usado este medio de transporte han sido víctimas de estas demoras, pero se han preguntado ¿por qué se quedan parados los trenes?
Es cierto que en ocasiones se debe a fallas de los trenes como pueden ser los neumáticos o que algunas puertas ya no cierran y deben sacarlos de circulación, pero en buena parte de los casos se debe -aunque resulte difícil de creer- a que probablemente se tuvo que rescatar un comal que cayó a las vías, tal y como pasó este jueves 20 de enero en la Línea 3.
La caída de objetos a las vías del Metro no es un tema menor. Tan solo el año pasado el STC informó que se cuenta con el registro de unos 570 objetos que cayeron a las vías del sistema, de ellos, 128 fueron rescatados exitosamente, “los cuales representaron un tiempo acumulado de mil 337 minutos de retardo, lo cual es significativo si se considera que un día completo tiene mil 440 minutos”, informó el STC.
Así entonces, si se suman los minutos en los que es necesario cortar la corriente eléctrica para poder descender a las vías y recuperar celulares, paraguas, mochilas, cafeteras y demás objetos, se trata de un acumulado de 24 horas de retraso.
De hecho, solo en las dos primeras semanas de este 2022, el Metro informó que ya había rescatado 37 objetos -28 de ellos fueron celulares-. En cada una de las ocasiones fue necesario parar el servicio de las distintas líneas para poder efectuar las maniobras pues hay que recordar que las vías de este sistema están electrificadas con 750 volts de corriente continua.
Ante la constante caída de objetos a las vías, las autoridades del Metro han tenido que ingeniar sus propias herramientas para retirar los objetos de las vías sin necesidad de hacer cortes a la corriente y así evitar más demoras.
En Hidalgo de la línea 3, por ejemplo, la inspectora jefa de estación se ha dado a la tarea de rescatar teléfonos celulares con ayuda de una pértiga -parte del equipo con el que cuentan-. Hace una semana, informó el Metro, la mujer logró rescatar un celular después de hacer cuatro intentos. Durante las maniobras se evitó el corte de corriente.
Y si bien es cierto que son variados los objetos que caen y en su mayoría suelen ser celulares (el 50%) porque mientras los usuarios esperan el arribo de los trenes pierden el control de sus aparatos, ha habido episodios protagonizados por objetos singulares.
El 1 de julio de 2019, por ejemplo, el servicio en la línea 3 del Metro se retrasó porque personal del sistema auxilió a una usuaria de la tercera edad que accidentalmente dejó caer a las vías su prótesis dental.
Este jueves, la línea 3 que corre de Indios Verdes a Universidad registró retrasos porque en la estación Balderas a un usuario se le cayó un comal y fue necesario hacer un corte de corriente por 15 minutos.
El 16 de diciembre pasado el servicio de la línea 2 se retrasó porque personal del Metro tuvo que retirar un bastón que cayó en las vías de la estación Pino Suárez.
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Las muletas también han retrasado el servicio. El 18 de noviembre – también en Pino Suárez- se debió cortar la corriente por 4 minutos para rescatar uno de estos objetos y el 5 de noviembre se cortó la corriente porque una muleta cayó en la estación Velódromo de la línea 9.
El 20 de octubre pasado, el servicio en la línea 5 del sistema tuvo retrasos porque se tuvo que rescatar una patineta que cayó en la estación Romero Rubio, mientras que el 9 de octubre se tuvo que rescatar el amortiguador de una motocicleta que cayó en las vías de la estación Zócalo-Tenochtitlán de la línea 2 y que provocó un corto circuito al paso del tren. Incluso, se reportó una pequeña explosión.
“El incidente derivó en el desalojo del tren en la misma estación Zócalo-Tenochtitlan, con inconvenientes para la movilidad de los usuarios y el tren afectado por el cortocircuito avanzó en vacío”, informó en su momento el Metro.
En temporada de lluvia es común que caigan paraguas en las vías.
“Entre las situaciones de mayor afectación al servicio en el año que concluyó, se contabilizan los casos de paraguas, un amortiguador de moto y una llanta de bicicleta que ocasionaron interrupciones al servicio por más de 15 minutos, debido al daño que ocasionaron al contacto con la barra guía electrificada que da energía a los trenes”, enfatizó el STC.
Ante esta situación y con el fin de no poner en riesgo la vida de los usuarios, el Metro ha hecho sinnúmero de llamados a los usuarios para cuidar sus pertenencias y en caso de que un objeto caiga a las vías, lo informen al policía de los andenes, al personal de seguridad identificado con chaleco color naranja o con el inspector jefe de estación, quienes determinarán las acciones a seguir para el rescate del artículo.
Tirar basura a las vías del tren, en especial objetos metálicos, generan cortocircuitos y retrasos en el servicio. pic.twitter.com/8RVCtdIgf4
— MetroCDMX (@MetroCDMX) January 21, 2022
