La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación en la que señala a la Secretaría de Marina (Semar) por la desaparición de un joven en Irapuato, Guanajuato. Se trata de Sergio Banda Delgado, que tenía 25 años cuando fue capturado por los elementos navales en la colonia Purísima del Jardín en Irapuato, el 9 de noviembre de 2018.
Los hechos, que ya fueron revelados por Animal Político, forman parte de una ola de desapariciones perpetradas en Guanajuato a finales de 2018 y atribuidas a la Marina. Se trata del mismo año en el que al menos 47 personas fueron desaparecidas en Nuevo Laredo, Tamaulipas, en unos hechos que la Fiscalía General de la República (FGR) también vincula a elementos de la Marina. Familias de las víctimas de Nuevo Laredo sospechan que algunos de los oficiales que estuvieron destinados en la ciudad fronteriza fueron posteriormente enviados a Guanajuato.
La desaparición de Sergio Banda Delgado tuvo lugar sobre las 21:30 horas del 9 de noviembre de 2018. Según relató su madre ante la Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato, elementos de la Marina lo capturaron junto a otra persona en la colonia Purísima del Jardín de Irapuato. El otro joven fue liberado posteriormente, mientras que Banda Delgado no regresó.
El sobreviviente relató haber sido torturado por los agentes. En concreto, dijo que fueron “detenidos, trasladados a un camino de terracería, golpeados e interrogados por personal de Semar. Particularmente, a él le rociaron salsa en el rostro e intentaron asfixiarlo en varias ocasiones hasta que finalmente lo tiraron en un río; mientras que a la otra persona se la llevaron, sin que hasta el momento se conozca su paradero”.
Cristina Delgado, madre del desaparecido, relató en entrevista con Animal Político en agosto de 2021 que tras la desaparición interpuso una denuncia en la fiscalía y trató de buscar a su hijo preguntando a los marinos desplegados en la zona. Lo único que logró es que un oficial le confirmase que hubo un operativo y que se habían registrado detenciones. A partir de entonces, solo promesas. “Nos dicen que sí andan investigando, que mandan oficios, que es tardado”, dijo.
La Semar rechazó su participación en los hechos, según informó la CNDH. La Marina está analizando la recomendación y todavía no tiene una postura al respecto. La anterior fue rechazada en un primer momento para, un mes después, aceptarse, sin dar explicaciones sobre qué motivó el cambio.
“Pruebas que obran en el expediente de queja acreditaron de manera indiciaria la participación de personal naval en la detención arbitraria de la víctima y su acompañante mientras caminaban en las inmediaciones de sus domicilios”, contradijo la CNDH.
En su recomendación, la institución que dirige Rosario Piedra Ibarra considera acreditado que las víctimas fueron detenidas por elementos navales, en cuyos uniformes se leía la leyenda “Marina” y viajaban en vehículos oficiales. Esto fue corroborado también por imágenes de cámaras de seguridad de la zona, que captaron el tránsito de vehículos de estas características en la zona en la que los jóvenes fueron capturados.
Las cámaras fueron también claves para acreditar la responsabilidad de los marinos en la desaparición de Christian Giovanny Martínez Juárez, ocurrida un mes antes y también certificada por la CNDH. A pesar de las evidencias, la Marina también negó en este caso su participación en los hechos.
“De acuerdo con lo declarado por el acompañante de la víctima, la detención se realizó sin que los elementos de la Semar mostraran una orden de aprehensión o existiera flagrancia delictiva y tampoco fueron puestos a disposición de alguna autoridad, como lo establece la normatividad en la materia”, señaló la CNDH.
“La Comisión Nacional contó con elementos suficientes para determinar que una de las personas detenidas fue víctima de desaparición forzada y su acompañante de detención arbitraria y privación ilegal de la libertad, aunque haya sido liberado el mismo día, y aun cuando no se cuenta con elementos suficientes para confirmar actos constitutivos de tortura en su contra, este organismo autónomo le reconoce su calidad de víctima”, señala.
La CNDH instó a la Marina a reparar el daño, incluyendo una indemnización a la familia de la víctima. A su vez, presentará una denuncia ante la FGR y ante la Controlaría General de la Marina.
