No hay manera. Ninguna integrante de mi CISEN quiere aflojar cuántos años cumplió el pasado viernes 26 de noviembre la nieta del ex presidente de México Gustavo Díaz Ordaz. Ya las amenacé. Les dije a todas que iba a publicar en este blog de alto rating fotos del “antes y después” de sus implantes de bubbies, pero les valió una y dos con sal. Este gueto de adictas al bisturí es fiel a su pacto: “entre mujeres podemos bajarnos el marido, pero nunca delataremos nuestra edad”.

Lo que sí me dice mi CISEN, luego de invertirles varias rondas de tequila, es que Paulina –una de las dos hijas que tuvo Alfredo Díaz Ordaz Borja y Paulina Castañón Ríos Zertuche– celebró la llegada de un nuevo año con dos eventos: el primero fue una cena para 25 personas en el restaurante Loma Linda, ya saben, el de las carnes deliciosas en Lomas de Chapultepec, y el segundo en el Sens, ese súper antro de Arcos Bosques.

Para la suerte de esta güeraza de voz ronca, el mismo día de su cumple el Sens celebraba su segundo aniversario y tocaba ni más ni menos que el afamado DJ Jack E, traído desde el  Hotel Byblos de St. Tropez. Ya se podrán imaginar que aquello estuvo de nervios.

Según mis fuentes, el más consentidor de la noche con la cumpleañera fue Jesús Sesma Suárez, su esposo y actual Secretario de Comunicación Social del Partido Verde Ecologista de México, quien esperará el próximo viaje de vacaciones familiar para comprar el regalo de la dueña de su corazón.

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