Por qué expertos rechazan que se dé ivermectina a pacientes COVID en CDMX
La decisión del gobierno de la Ciudad de México de dar ivermectina y azitromicina a pacientes ambulatorios con COVID provocó críticas y cuestionamientos de especialistas médicos, que consideran que aún no hay suficiente evidencia científica para respaldar el uso de esas sustancias, sobre todo en el caso de la ivermectina.
“No hay ningún estudio que demuestre de manera fehaciente, con muchos pacientes, en condiciones controladas contra un placebo, que el fármaco pueda funcionar”, dijo en entrevista sobre la ivermectina Rodrigo Jácome, profesor de Biología celular en la Facultad de Ciencias de la UNAM.
“Lo que se ha comprobado en el laboratorio es que, además de ser un buen antiparasitario, podría ayudar a combatir infecciones virales. Pero una cosa es en el laboratorio y la otra es en el público en general, ya In Vivo, en los humanos”, agregó.
Salud de CDMX defiende su utilidad
La secretaria de Salud de la Ciudad de México, Oliva López Arellano, afirmó este lunes que el uso de la ivermectina para el tratamiento contra COVID-19 se aprobó como las vacunas: bajo una lógica de emergencia sanitaria.
Aseguró que no hay evidencia clara de ningún tratamiento antiviral contra la enfermedad, pero destacó que la situación con las vacunas aprobadas para su administración era similar:
“Son vacunas que se han aprobado en la lógica de la emergencia sanitaria, prácticamente ni una ha concluido la fase 3 de investigación clínica y en la misma lógica estamos usando este medicamento que es muy seguro y que es de fácil administración”.
Además, precisó que la prescripción del medicamento está respaldada por varios estudios científicos internacionales, así como distintos ensayos clínicos.
La secretaria de salud capitalina contó 29 estudios que muestran una utilidad en etapas tempranas, 12 que han evidenciado una evidencia positiva en profilaxis, 14 con evidencia como tratamiento de casos moderados.
Lee: No debes automedicarte azitromicina o ivermectina, la OMS no lo recomienda
Consultada, Salud capitalina envió como sustento de su decisión un documento denominado “Revisión de la evidencia emergente que demuestra la eficacia de la ivermectina en la profilaxis y el tratamiento de COVID-19”, en el que un grupo de científicos sí respalda el uso de la ivermectina, aunque dicho documento aún no tiene la llamada revisión por pares, parte del proceso con el que la comunidad científica valida una investigación.
“En un ambiente como en el que tenemos ahora, donde hay tanto publicado, tanto de manera formal como informal, literalmente hay decenas de miles de publicaciones sobre COVID y sus potenciales tratamientos”, refirió Alejandro Macías, integrante del Área de Microbiología y Enfermedades Infecciosas del Departamento de Medicina y Nutrición en la Universidad de Guanajuato.
“Tú puedes encontrar casi lo que tú quieras si buscas lo suficiente. Entonces, no es raro que digan ‘es que está este estudio o estos estudios que demuestran que la azitromicina y la ivermectina funcionan contra el COVID’, pero la verdad es que la calidad de la información no da para decir que eso es clave en el tratamiento.
“Si tú vas y analizas esos estudios, la calidad de la evidencia no da para medicar ivermectina”.
En esto coincidió Alberto Campillo, profesor en el Departamento de Biología Evolutiva de la Facultad de Ciencias de la UNAM.
“No hay estudios concluyentes que digan que la ivermectina funciona. De hecho, en los análisis in vitro con células, aparentemente funciona, pero si la dosis equivalente usada en estas células se extrapolara al ser humano, causaría daño al organismo, ya que se requeriría de una dosis enorme”, dijo en entrevista.
“Investigadores han señalado que la dosis requerida de ivermectina para usarla en estudios clínicos sería demasiado alta (3 veces más). Esto sobrepasaría el máximo permitido para uso humano, lo que podría ser tóxico para nuestro organismo”.
Ante la insistencia de las autoridades en usar la ivermectina, el jefe del Departamento de Farmacología de la Facultad de Medicina, el doctor Omar Carrasco Ortega comenta que la invitación podría ser, a quienes están postulando esta teoría de tratamiento, a que se haga un protocolo de manera rigurosa, con un método científico, que compruebe la supuesta eficacia. Aunque, insiste, no existen resultados que confirmen que este fármaco puede ser empleado en personas para disminuir la transmisibilidad del SARS-CoV-2.
Luego de que el gobierno capitalino señalara que había decidido la administración de la ivermectina tras consultar a expertos de instituciones como el Instituto Nacional de Nutrición, esa institución publicó también un posicionamiento, donde habló de utilizarla pero aún en una etapa de ensayo clínico controlado, internacional, “que permita favorecer la investigación de su uso terapeútico”.
Comunicado en relación al uso de la ivermectina en COVID-19. pic.twitter.com/I8kphmFdCA
— INCMNSZ (@incmnszmx) January 23, 2021
Puede resultar en pacientes sobremedicados
Los especialistas médicos consultados insistieron en que, ante la falta de evidencia de calidad sobre su eficacia, el gasto en ivermectina podría ser inútil y resultar en que se sobremedique a los pacientes.
“Debiéramos invertir mayor energía, esfuerzo y conocimiento en ver que lo que la gente necesita ahorita es la oxigenación”, expresó Macías.
“El daño está en pensar que con esos medicamentos vas a estar mejor, cuando en realidad lo que necesitas es recibir esa oxigenación”.
La Asociación Mexicana de Infectología señaló en ese sentido en un comunicado que “las recomendaciones sin sustento científico crean una falsa expectativa, retrasan la atención intrahospitalaria y condicionan aumento de las complicaciones”.
Covid-19. La asociación mexicana de infectología NO recomienda el uso de Ivermectina, azitromicina e hdroxicloroquina. pic.twitter.com/610HsEwoqf
— Alejandro Macias (@doctormacias) January 23, 2021
¿Y en el caso de la azitromicina?
“La azitromicina es un antibiótico, muy seguro y muy bueno. Y se ha indicado en pacientes que tienen el riesgo de tener una infección bacteriana además de la COVID-19, o que después del COVID les pueda dar una infección bacteriana, pero no es un tratamiento para el COVID”, explicó el profesor Jácome.
Organismos internacionales tampoco avalan la ivermectina
La doctora Brenda Guizar Ramírez de la Escuela Superior de Enfermería y Obstetricia del IPN recordó que la FDA y muchos organismos internacionales especializados en medicina indican que “no está autorizado el uso de ivermectina en humanos que son pacientes COVID-19 porque se requiere mayor cantidad de estudios científicos”.
El 14 de enero, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) determinó que los estudios realizados hasta entonces sobre el uso de la ivermectina presentaban un riesgo elevado de sesgo y muy poca certeza, para llegar a una conclusión sobre sus beneficios y sus daños. Entonces dijo que no había “ninguna evidencia científica de su eficacia y su seguridad para el tratamiento de la enfermedad” COVID, y desde entonces la OPS no ha emitido otro documento o actualización respecto a esa sustancia.
En una revisión, El Sabueso encontró además un par de estudios publicados en plataformas científicas, uno en The Lancet y otro en Springer, en enero de este año, en el que también los científicos concluyeron que aún no había suficiente evidencia para respaldar el uso de ivermectina en pacientes COVID.
“La ivermectina inhibe la replicación del SARS-CoV-2 in vitro en concentraciones que no se pueden alcanzar fácilmente con las dosis aprobadas actualmente. Existe evidencia limitada para apoyar su uso clínico en pacientes con COVID-19”, se lee en el texto publicado en The Lancet.
En el caso de la agencia FDA estadounidense, tampoco recomienda hasta ahora la ivermectina para la prevención o el tratamiento del COVID-19.
#YoSoyAnimal
¡Agrega uno!