Familiares de los tres hermanos mexicanos que se enfrentan a la pena de muerte en Malasia por un presunto delito de narcotráfico los visitaron por primera vez, a 24 horas de que inicie el juicio que podría llevarlos a la horca.
Hace unas horas tres mujeres de la familia González Villarreal, llegadas horas antes de México, cruzaron los portones metálicos del presidio de máxima seguridad de Sungai Buloh para ver y conversar con Luis Alfonso, José Regino y Simón
Los tres reos oriundos de Sinaloa mantuvieran un encuentro de unas dos horas con sus hermanas Alejandrina y Leticia y con María Consuelo Soto, la esposa de Luis Alfonso, el mayor de los tres. Al término del encuentro familiar tras los altos muros de la cárcel, las mujeres se mostraron reconfortadas del estado de ánimo y de salud de los hermanos.
“Están tranquilos y bien de salud, también optimistas”, dijo a Efe Alejandrina pocos minutos después de ver a sus hermanos.
Luis Alfonso, de 47 años; José Regino, de 36, y Simón González Villarreal, de 33, fueron detenidos en marzo de 2008 en una nave industrial de Johor Baru, Malasia, donde la policía encontró supuesto material para la fabricación de metanfetaminas, precursores químicos y cerca de 29 kilos de esa droga.
La legislación de Malasia contempla la pena capital para la persona declarada culpable de haber sido detenida en posesión de más de 15 gramos de cualquier droga de las consideradas duras.
Con información de EFE
