Hoy, el Senado aprobó en comisiones, en lo general, reformas a la Constitución Mexicana para eliminar el fuero de los servidores públicos, con el objetivo de que hasta el Presidente de la República pueda ser sujeto a proceso penal. Sin embargo, ningún funcionario público podrá ser privado de su libertad ni separado del cargo, sino hasta que un juez le dicte sentencia por encontrarlo culpable de algún delito.
La reforma fue propuesta por el senador perredista Pablo Gómez, quien explicó que se busca impedir que haya impunidad, “pero se refuerza la inmunidad porque se pierde el fuero hasta en tanto un juez determine la culpabilidad del acusado, por lo que hasta en ese momento el funcionario en turno podría ser removido y sometido a la condena que determine la justicia.”
El perredista dijo que “lo que se propone es que puedan ser acusados ante un Tribunal normal, común y corriente, como cualquier otro ciudadano y si el Juez lo decide, porque haya elementos, abre el proceso, que es el juicio igual que cualquier otro. Es decir, la eliminación del fuero”.
“Cualquiera, no importa el puesto que tenga, podría ser sometido a un proceso penal en un juzgado como cualquier otro ciudadano, y ahí que se defienda y si lo declaran culpable, pues es culpable y se acabó. Ésa es la reforma”, dijo Gómez.
En las próximas horas se discutirá la reforma en lo particular. Los senadores perredistas miembros de las comisiones de Puntos Constitucionales y de Estudios Legislativos, Tomás Torres y Sergio Álvarez Mata, presentaron reservas.
La intención es subir el dictamen al pleno la próxima semana.
Con información de Milenio.