Desde el 10 de diciembre –fecha en que las familias de los cuatro estudiantes de la Universidad de Guadalajara denunciaron su desaparición- la Procuraduría General de Justicia de Jalisco giró una orden de presentación a Israel Mariscal, actual presidente de la Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG), y al candidato único a sucederle en el puesto, David Castorena. Sin embargo, hasta el momento no han sido localizados.
El procurador Tomás Coronado reveló que Mariscal y Castorena son requeridos como testigos del asesinato de los cuatro estudiantes de la UdeG y del padre de uno de ellos, pero que todavía no obtiene respuesta.
Coronado insistió en que el principal sospechoso del homicidio es el sujeto conocido como “El Tatuado”. El diario Mural publicó que responde al nombre de Gerardo Flores Gómez.
De acuerdo con información de la Procuraduría estatal, en 1997, “El Tatuado” fue detenido por tentativa de homicidio y dos años después por robo.
En declaraciones públicas, Israel Mariscal ha dicho que “El Tatuado” era “un simple velador” del edificio de la FEG, donde encontraron las dos fosas con los cuatro cadáveres de los estudiantes y el del padre de uno de ellos, en la calle Carlos Pereyra 100, atrás de la Normal de Jalisco.
Animal Político reveló que “El Tatuado” era más que un simple velador. Acompañó a David Castorena, candidato a la dirección de la FEG, en varias reuniones como parte de su campaña.
Las imágenes que lo muestran fueron tomadas de la página de Facebook de la FEG y ya las borraron.
Se presume que Israel Mariscal y David Castorena solicitaron un amparo para evitar su detención, pero la Procuraduría estatal aún no lo confirma.
“Porros”
No son estudiantes, pero son reconocidos como representantes de estudiantes de nivel secundaria por la Secretaría de Educación de Jalisco (SEJ).
Desde 1991, la FEG dejó de ser una organización estudiantil para la UdeG. Ahora, la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) es la agrupación estudiantil oficial de la universidad.
No es la primera vez que la FEG se involucra en hechos violentos.
El 12 de septiembre de 2007, integrantes de esta agrupación encabezados por “El Tatuado” ingresaron al Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) de la UdeG. Destruyeron sillas y cristales y golpearon a una decena de estudiantes. Nunca se detuvo a los responsables.
Durante el conflicto en la UdeG (julio-agosto de 2008) entre el entonces rector, Carlos Briseño Torres, y Raúl Padilla López por el control político de la universidad, el primero recurrió a los integrantes de la FEG con el propósito de que sirvieran de “porros”. El contacto habría sido Gabriel Torres, entonces vicerrector de la UdeG, según la denuncia de la universidad.
Unos días antes de la destitución de Briseño –el 27 de agosto de 2008-, recibió en la rectoría a los líderes de la FEG con la frase “Ésta es su casa”.
Según las crónicas periodísticas de ese día, alrededor de 50 miembros de la “organización estudiantil”, encabezados por Israel Mariscal, entonces candidato a dirigir la FEG, entregaron un pliego petitorio al rector. Pedían el cese de violencia por parte de la FEU. Otra de sus demandas era la desaparición de las asociaciones de padres de familia y apoyo para estudios de posgrados, entre otras.
Los “estudiantes” de la FEG que asistieron a esta reunión rondaban los 40 años. Estaba presente Gabriel Torres como vicerrector.
En la rectoría de la UdeG, la FEG ondeó su bandera por un momento. Unos días después –el 29 de agosto de 2008- vendría la destitución de Briseño y de Gabriel Torres. Para tratar de recuperar la rectoría, Torres dijo públicamente que invitaba a la movilización estudiantil, incluido a los integrantes de la FEG. “Ahora sí nos vamos a aliar”, declaró.
