Petróleos Mexicanos (Pemex) y Protección Civil (PC) de la Secretaría de Gobernación, ordenaron detener las labores de rescate que se realizaban en el edificio B2 del Centro de Administración de Pemex (CAP), donde el jueves 31 de enero se registró una explosión.
Lo anterior fue confirmado por Isaac Oxenhaut, Coordinador Nacional del Área de Socorros de la Cruz Roja Mexicana, entrevistado el domingo 3 de febrero poco antes de las ocho de la noche.
A 76 horas de la explosión que cobró la vida de por lo menos 36 personas y dejó heridas a más de 100, las autoridades de Pemex y PC seguían sin informar las causas del incidente.
Lo único que se sabe hasta el momento, es que el jueves 31 de enero trabajadores de la empresa Conservación Pilotes de Control S.A (Copicosa), realizaban labores de mantenimiento en los “pilotes” que sostienen la estructura del edificio B2.
“Era un mantenimiento sencillo”, dijo Guillermo Verano, representante de la Copicosa, quien aseguró que su trabajo no implicaba remover ninguno de los pilotes que sostenía el edificio.
Copicosa es una empresa contratista de Pemex. Tiene dos décadas laborando con la paraestatal. El fundador es el Ingeniero Manuel González Flores, inventor de los pilotes de control.
Los pilotes de control son un sistema que permiten controlar, dentro de los parámetros adecuados, “los movimientos e inclinaciones que se originan de la cimentación”.
Actualmente, Copicosa brinda mantenimiento a 600 edificios particulares, públicos y monumentos históricos de la Ciudad de México.
En lo que fue el cuarto día de labores de rescate de víctimas, Enrique Peña Nieto, Presidente de México, canceló una visita que tenía programada por la mañana del domingo en las instalaciones del CAP.
Por su parte, Pedro Joaquín Coldwell, Secretario de Energía; Jesús Murillo, Procurador General de la República y Emilio Lozoya, Director de Pemex, realizaron un recorrido por la zona afectada y por la noche agradecieron el trabajo realizado por los cuerpos de rescate que han participado en la localización de las víctimas.
A las ocho de la noche, familiares, amigos y compañeros de los trabajadores fallecidos, acudieron a las inmediaciones del CAP para colocar una ofrenda, prender veladoras y cantar un “Padre Nuestro” en memoria de las víctimas.
En tanto, familiares de María de la Cruz Canales, trabajadora de Pemex y reportada como desaparecida desde el jueves 31 de enero, seguían pidiendo a las autoridades federales no detener la búsqueda de la señora.
“Tenemos la esperanza de encontrarla viva”, dijo Alan Carmona Canales, hijo de María de la Cruz.
