El secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Monte Alejandro Rubido, confirmó que fue abatido Francisco “El Pantera” Galeana, líder de Los Caballeros Templarios en Apatzingán, Michoacán.
En conferencia de prensa, Rubido informó que el Pantera cayó abatido junto con un hombre y una mujer ayer jueves 27 de febrero en el municipio de Arteaga.
Una vez abatido, a Francisco Galeana se le identificó por un tatuaje de una pantera que tenía en la espalda.
Además, el funcionario federal dijo que se abrirá una investigación porque desde abril de 2013 se filtró que el Pantera había muerto.
Galeana era uno de los principales operadores y sicarios de la organización delictiva y fue quien controló los últimos negocios en el municipio de Apatzingán, bastión de los Templarios.
Hasta hace un mes, Francisco Galeana se paseaba por las calles y sus domicilios se encontraban a tan solo tres cuadras del Palacio Municipal de dicha ciudad michoacana. En esa región los habitantes le temían, pues fue el presunto responsable de haber ordenado la quema de tiendas de conveniencia y farmacias que no pagaran derecho de piso.
Al Pantera se le imputa también el asesinato de 18 cortadores de limón que trabajaban en Buenavista y La Ruana que se negaron a pagar una extorsión.
Galeana fue, por al menos dos años, el encargado de Uruapan y mano derecha de Dionicio Loya Plancarte, conocido como “el Tío”, recientemente capturado. El Pantera era el encargado de fijar salarios a vigilantes e informantes y fijaba las cuotas de los limoneros y aguacateros, y a finales del año inició con las extorsiones a dueños de minas.
