“Todo uso de productos farmacéuticos a base de mariguana está permitido por las convenciones. Los Estados no tienen por qué impedir la circulación y la utilización de medicamentos que puedan aportar un beneficio a quien hoy sufre”, dijo Antonio Mazzitelli, representante en México de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.